919.016 kilómetros deberán recorrer, por las carreteras de la Península Ibérica los 80 equipos que conforman la categoría de bronce del fútbol español durante la próxima temporada. Una cifra que resulta de la suma de los recorridos de ida y vuelta que cada uno de los clubes que militen de 2ªB deberá acometer según la distribución en cuatro grupos de 20 que aprobó la Comisión de Clubes el pasado 4 de julio en Las Rozas.

La gran cantidad de equipos implicados y su irregular distribución sobre el mapa, con pequeñas comunidades como Euskadi con diez representantes frente a otras de gran extensión como Castilla-La Mancha con sólo cuatro clubes en la categoría, complican un panorama donde el objetivo debe de ser  evitar los tediosos y costosos desplazamientos en autobús con un reparto lógico de los grupos en función del criterio de proximidad geográfica.

32.000 kilómetros menos no convencen a la Comisión

Propuesta de la FFCM votada por la Comisión | IMAGEN: Hit Segunda B
Propuesta de la FFCM votada por la Comisión | IMAGEN: Hit Segunda B

En ese sentido, la propuesta que durante los días previos a la asamblea circulaba en los mentideros futbolísticos como la más probable, y que coincidía con el planteamiento de la Federación Vasca, reducía en unos 32.000 el total de kilómetros a recorrer. Una cantidad que viene a coincidir con la que ahorrarían en sus desplazamientos solamente los cuatro equipos de la Comunidad Foral de Navarra si, tras su año de ‘penitencia’ en el Grupo I, regresaban a su hábitat natural compartiendo grupo con sus vecinos vascos.

Precisamente Euskadi, la segunda Comunidad con más representantes en la categoría de bronce, sería otra de las que se beneficiaría por los casi 2.200 kms. de media que hubiesen hecho de menos sus equipos al liberarse de los largos desplazamientos a Castilla-La Mancha que les lleva imponiendo la Federación por cuarto año consecutivo.

La propuesta vasca, además de mantener una línea continuista, conseguía satisfacer una de las normas no escritas en el reparto de equipos, que el mismo presidente de la Comisión, y a la sazón de la Territorial de Castilla y León, Marcelino Maté, no dejaba de recordar los días previos a la reunión: la de intentar en la medida de lo posible no romper comunidades en el reparto. Sin embargo contaba con el rechazo frontal de la Federación Extremeña, reacia a que  Villanovense, Extremadura y Mérida emigraran del sur al norte, lo que suponía un exceso de más de 5.000 kilómetros de media en viajes para sus tres equipos.

La Roda, un 'sí pero no' que encaja el puzzle

En esta tesitura no ha sido de extrañar que esta Federación fuera de las más interesadas en posicionarse a favor de la sorprendente propuesta planteada por la Federación de Castilla-La Mancha que, con el objetivo de no separarse de sus compañeros de grupo de la pasada campaña, Euskadi, Madrid y el representante canario, no dudó en ‘sacrificar’ a uno de sus cuatro representantes, La Roda, para enviarlo en solitario a fin de cuadrar el Grupo IV sin necesidad de mover a los tres representantes de Extremadura.

La opción defendida en la Comisión por el presidente del Toledo, Fernando Collado, tenía precisamente al equipo de la Ciudad Imperial como máximo interesado en no desplazarse al grupo del sur y mantenerse en compañía de los equipos madrileños en el Grupo II, para recortar casi 3.000 kms. de desplazamiento, bastantes. más de los que pueden presumir librarse por ejemplo los cinco conjuntos de la Territorial de Madrid, que apoyaba recíprocamente la posibilidad de compartir grupo con los manchegos para ahorrar una media de 1.200 km. en viajes.

Con todo, el verdadero 'tapado' por la propuesta manchega resulta ser la UD Logroñes, que, a pesar de abandonar la límitrofe comunidad navarra, ve recompensada su nueva ubicación en el mismo grupo de los vascos con 7.500 kms menos en viajes. Está probado que la marcha del equipo riojano en el grupo I fue además uno de los motivos alegados para apoyar la propuesta ganadora por parte de equipos de Castilla y León como la Cultural Leonesa, o gallegos como el Pontevedra, club que a pesar de incrementar en cerca de 2.000 kms. su itinerario, argumentaba públicamente la ventaja de desprenderse de la competencia de uno de los equipos acostumbrados a clasificarse para playoffs estas últimas temporadas.

La separación de La Roda, clave en la propuesta.
La separación de La Roda, clave en la propuesta.

Este factor deportivo es precisamente el que explica la paradoja que se da en la propia Territorial de Castilla-La Mancha, que incluye, tras los equipos navarros, a uno de los equipos más perjudicados en lo que a la longitud de los viajes se refiere. Se trata del Albacete, que está conformando un potentísimo bloque con el claro objetivo de recuperar la categoría perdida, y que habría ahorrado 5.248 kms en desplazamientos de haberse aceptado la propuesta alternativa de jugar junto al resto de equipos de su comunidad en el grupo IV. Sin embargo, el exceso de kilometraje no parece haber pesado en los del Carlos Belmonte, que por su cercanía con la Comunidad de Murcia, aparecía en los quinielas como principal candidato manchego a emigrar al Grupo IV.

No es difícil comprender por qué el inesperado ‘cambio de cromos’ con La Roda ha sido recibido con alivio y satisfacción por los equipos murcianos y andaluces que a priori aspiran a los playoffs de ascenso a la Liga 2, y que habrían propiciado que sus respectivas territoriales también vieran con buenos ojos la propuesta de Castilla-La Mancha. Más complicado resulta explicar por qué el equipo rodense, distante apenas 35 kms. del equipo de la capital de la provincia, renuncia no sólo al gran derbi provincial contra el Albacete sino a jugar separado del resto de su Comunidad en claro contraste con el criterio que había utilizado apenas un año antes para abandonar el grupo cuarto y adherirse al segundo.

Si bien es cierto que el propio club de La Roda, a través de su web, emitía un comunicado en desacuerdo con la propuesta de su propia Federación, no lo es menos que su presidente, Juan Francisco Toboso, reconocía ver con buenos ojos una compensación económica previa por el cambio de grupo; compensación estimada en un montante no inferior a 25.000 euros, y que, según fuentes no oficiales, se podrían complementar con otro tipo de ayudas. Algo de gran valor para un club inmerso la pasada campaña en problemas para solventar deudas con sus jugadores por el cobro de nóminas atrasadas.

La filtración de estas cantidades no ha terminado de sentar bien en el seno de los conjuntos navarros, los más perjudicados por esta propuesta que, si nada lo impide, será ratificada en la Asamblea de la RFEF. Tanto el presidente de la Federación Navarra, Rafael del Amo, como el del Izarra, Alfonso Canela, recordaban la promesa no cumplida en la Comisión de no repetir el aislamiento de sus equipos en el Grupo I, y reconocían la ‘miseria’ que suponía la cantidad de 10.000 euros recibida el pasado curso tanto por el Cacereño como por ellos mismos  para sufragar los gastos extraordinarios por viajes y pérdida de taquillaje. Gastos que se exceden del presupuesto de clubes humildes, como es el caso del equipo de Estalla, que planteó por segundo año consecutivo a sus socios la posibilidad de renunciar a la categoría.

Propuesta defendida por las Federaciones vasca y navarra.
Propuesta defendida por las Federaciones vasca y navarra.

La existencia de dicha compensación adquiere tintes de 'agravio comparativo' para los equipos vascos, si se tiene en cuenta que el exceso en kilometraje que supone para La Roda no ir emparejada con sus paisanos suma algo más de 1.800 km. unos 400 menos de la media que deben afrontar cada uno de los 10 clubes vascos sin recibir a cambio subvención alguna.

Muchísimo más desproporcionada resulta esta ayuda económica cuando se estima un perjuicio cuatro veces superior, más de 8.000 km. extraordinarios,de media para el citado Izarra, Osasuna Promesas, Tudelano y Mutilvera, club que debutará en la categoría ostentando el dudoso honor de ser el más perjudicado de todos en la propuesta, con 8.922 km. más de recorrido en desplazamientos.

A la luz de los datos, ni siquiera en términos absolutos se podría justificar como singular la solicitud de ayuda de La Roda, toda vez que, con 14.848 kilómetros por recorrer, no es ni mucho menos el equipo que más vaya a moverse en autobús esta temporada. Hasta 13 equipos de la categoría de bronce preceden a La Roda en un curioso ranking de viajeros que lideran sus vecinos del Albacete con 18.174 km. y a los que se suman Boiro, Celta B, Coruxo, Pontevedra, Racing de Ferrol, Guijuelo y obviamente los cuatro equipos navarros, en el grupo I, además del Cartagena y el Mérida en el propio grupo IV.

En definitiva, recopilando los datos por comunidades y equipos, y siempre recordando que los implicados en el inamovible Grupo 3 resultan irrelevantes en este cotejo, es evidente que son más las beneficiadas por la propuesta triunfadora en la Comisión de Clubes (7) que las perjudicadas (5), si bien es cierto que las distancias en kilómetros por equipo resultan más significativas en este segundo bloque.