Mañana, 3 de agosto, a las 20:00h, el Fútbol Club Cartagena disputará su tercer encuentro amistoso de pretemporada. Este será contra el Orihuela en las instalaciones del Pinatar Arena, cuyo propietario es el capitán albinegro, Mariano Sánchez y cuyo mánager es el nuevo director deportivo, Fran de Paula.

En el primer amistoso, el equipo dirigido por Luis García Tevenet goleó por 5-0 a su equipo filial, mientras que en el partido disputado el pasado día 31 en el Estadio Juan Cayuela, se le venció por 0-3 al Olímpico de Totana.

El equipo donde Tevenet colgó las botas y cogió la pizarra

En este partido habrá numerosos encuentros. Uno de ellos es el del propio Tevenet con el Orihuela, equipo con el que terminó su carrera como futbolista y comenzó la de entrenador. Cuando tras la finalización del anterior encuentro, el sevillano fue preguntado por la “falta de competitividad” que se percibía en el calendario de pretemporada del conjunto albinegro, el técnico puso como ejemplo al equipo alicantino, del cual dijo que, a pesar de estar en Tercera División estaba confeccionando un equipo digno de Segunda B y de seguro será un gallito en su categoría.

Cañadas y Tonino se enfrentarán a su exequipo

Precisamente dos de esos jugadores de “superior categoría” que en recalado en Orihuela son dos de los jugadores que el año pasado llevaron al equipo albinegro a posiciones de playoff. El primero de ellos, Tonino, fue el segundo máximo anotador y el otro, Antonio Cañadas, uno de los líderes a balón parado que desempeñó un papel clave en el tramo final de temporada.

No son muchos los excompañeros que estos dos interiores diestros encontraran en el partido de mañana, pues a expensas de algunos canteranos que ya el año pasado llegaron a entrenar con el primer equipo, solo 6 futbolistas de la pasada campaña continúan en el equipo de la ciudad portuaria.

Otro reencuentro será el del propio Cañadas con el nuevo albinegro Antoñito, con el cual coincidió en el Poli Ejido, al que en una entrevista reciente a SportCartagena declaró que trataba “como a un hijo”.