La presentación del Hércules de Alicante Club de Fútbol ante su afición tuvo una gran acogida y un grito de esperanza de cara a la nueva temporada 2014/15 en Segunda División 'B'. Firmando una pretemporada como invictos y encarando de manera muy positiva el debut ante el Eldense la próxima semana. Así lo demostraron ante el Albacete, equipo recién ascendido a la Liga Adelante, con un partido muy trabajado tácticamente y desplegando un juego agresivo y constante ofensivamente.

De inicio, los blanquiazules partieron con un esquema inicial que dejaba varias pistas de cara al comienzo de la competición liguera. Pacheta alineaba un solo punta de referencia, Javier Portillo, con un trivote de creación en la medular, levantando muchas sorpresas de cara a lo que se había visto durante la pretemporada. El primer encuentro del Hércules en el césped del José Rico Pérez necesitaba ser diferente y para ello el entrenador burgalés tuvo que tirar de ideas innovadoras.

Garra, intensidad, control y dominio fueron las claves de la primera mitad de partido para los blanquiazules. El Albacete Balompié, quizás demasiado replegado, no reaccionaba ante un Hércules que se encontraba cómodo y solvente con la posesión de balón, además mantenía un bloque sólido cuando los manchegos tomaban el esférico y contraatacaban. A pesar de ello, el marcador no se movió y los primeros aplausos de la gradería se escuchaban a la entrada de túneles de vestuarios de los protagonistas del partido.

Luis César movió su banquillo y comenzó con el carrusel de cambios para el segundo acto, no lo hizo Pacheta, que aguantó al equipo titular, a excepción del cambio importante en la referencia. La entrada de Fernando Rodríguez, en sustitución de Portillo, cambiaría el partido minutos después con la inauguración del luminoso tras una gran jugada de combinación. José Luis Miñano servía un gol en bandeja al natural de Pilas para que se estrenase como goleador con la camiseta del Hércules.

Con el gol, el partido se relajó y ambos equipos protagonizaron su fútbol marcado por la variedad de jugadores que iban entrando desde el banquillo, algo habitual tratándose de pretemporada y con el inicio de competición a la vuelta de la esquina. Chechu Flores destacó con varias llegadas, sin mayor peligro, asistido por un Adrià Granell muy activo. Por su parte, el Albacete, por medio de Jorge Díaz, lo intentó sin suerte y sin pisar área rival. Finalmente, los canteranos agotaron el partido y sumaron minutos ante su afición.

La XXI Edición del Trofeo Ciudad de Alicante se queda en casa con un Hércules que dejó una imagen de ilusión a su afición, que este año tendrá que vivir desde un punto de vista de bronce el fútbol en la capital de la Costa Blanca.