El Real Jaén cumple 93 años de historia. Nueve décadas y tres años en los que el conjunto blanco no siempre fue blanco. Una vida casi centenaria en la que en muchas ocasiones su corazón ha estado cerca de dejar de latir. Pero el sentimiento de una afición acostumbrada a sufrir durante toda una vida, siempre ha ayudado a este club a seguir adelante. Ahora, mediada la segunda década de este siglo XXI, el Real Jaén emprende un proyecto ilusionante basado en la austeridad y la juventud. Un nuevo rumbo que estará respaldado una vez más por una masa social que no quiere dejar de soñar en busca de hacer realidad el sueño de retornar a situaciones de gloria deportiva vividas en épocas pasadas.

Fue durante la década de los años 20, cuando se fundaron en Andalucía la mayor parte de los primeros equipos organizados. En la ciudad de Jaén, estos inicios del balompié se retrasaron un poco más que en otras localizaciones de la comunidad andaluza. Hubo que esperar hasta el 13 de agosto de 1922, para que el Doctor Nogales llevase a cabo la iniciativa de fundar el que por entonces fue llamado Jaén FC.

A dicho equipo, que vestía con una indumentaria totalmente blanca, pronto le salió un competidor en la capital del Santo Reino. Llevó por nombre Unión Deportiva Jiennense y fue creado en marzo de 1923. A partir de entonces, la lucha de ambos por hacerse con el mayor número de aficionados y seguidores y de esta manera llegar a ser considerado el primer equipo de la ciudad, estuvo a la orden del día. Otro equipo, el Racing Club Jaén, también intentó hacerse con protagonismo pero sin demasiado éxito.

Al final, con el paso del tiempo, fue el Jaén FC el que más masa social logró atraer. Con sede en el número 2 de la calle Mesa, este equipo debutó fuera de casa ante el Carolina Sporting Club, obteniendo la primera derrota de su corta historia por 5-0. El primer trofeo ganado por los blancos, cedido por el Ayuntamiento, fue cosechado en el mes de agosto ante el Linares FC en un encuentro en el que los capitalinos vencieron por 3-0. Al no disponer de un estadio con garantías para la celebración de un partido de fútbol oficial, el equipo no estuvo federado hasta el año 1923. Fue un año después, en 1924, cuando se llevó a cabo la construcción del Estadio de Peñamefecit, inaugurado el 28 de septiembre del mismo año en un encuentro ante la AD Ferroviaria de Málaga.

Sin embargo, no todo fueron buenas noticias y en 1929, el nuevo estadio queda en desuso. El fútbol dejó de ilusionar a la población jienense y los proyectos deportivos impulsados años atrás con la creación del club desembocaron en la frustración. Fue Don Joaquín Mestre Medina, el hombre que volvió a llenar de luz la entidad jienense. Este inspector de sanidad jienense, impulsó un nuevo proyecto que el 12 de junio de 1929 tomó el nombre de Sociedad Olímpica Jiennense. Este nuevo club, vestía de grana y negro y albergaba diferentes disciplinas deportivas aparte del fútbol. Gracias a los buenos resultados conseguidos en los partidos amistosos jugados por este nuevo equipo, la afición al fútbol en Jaén comenzó su particular resurrección.

En 1930, el Doctor Nogales volvió a entrar en acción y se convirtió en nuevo presidente del club sustituyendo a Fernando Alisal. Aquel mismo año, el equipo jugó inscrito en la Federación Regional Sur, donde quedó encuadrado con la UD Andújar, y los cordobeses del Córdoba FC, UD Ferroviaria y Nacional FC. El conjunto jienense se proclamó campeón y ascendió de categoría. Tras la muerte de Nogales en 1942, y tras unos años en los que el equipo vivió situaciones muy dispares de éxitos deportivos y problemas económicos, accedió a la presidencia Diego Infante. Ese mismo año el club se adjudicó la Copa Federación Sur al imponerse al San Andrés por 1-4. Fue el siguiente año, cuando el conjunto dirigido por Juan José Cachón jugó por primera vez en una competición de carácter nacional como la Tercera División y en la que los de Jaén quedaron subcampeones.

El 29 de octubre de 1944, llegó una de las fechas más señaladas para la historia del club. Se inauguró el Estadio de La Victoria, lugar que fue la casa del equipo jienense durante más de 60 años. El 5 de septiembre de 1947 bajo el mandato de Joaquín Mollinedo Rojas, presidente de la Diputación provincial de Jaén, el club recibió el visto bueno del gobierno y de la RFEF para pasar a ser el Real Jaén Club de Fútbol, el cual comenzó a vestir totalmente de blanco. En lo deportivo, no acabó bien la década de los 40. El Real Jaén quedó muy alejado de los puestos de privilegio y no fue hasta los años 50 cuando vivió sus mayores éxitos deportivos.

Foto:jaenenlamemoria

En la temporada 51/52, el proyecto impuesto por una nueva directiva marchó de lo lindo y Arregui, Uncilla y Uceda anotaron 65 goles para ayudar a su equipo a ascender a la Segunda División del fútbol español. Fue esa misma campaña, cuando el Real Jaén se proclamó campeón de la Copa Federación al ganar 3-1 en la final jugada en el Estadio Metropolitano ante la UD Orensana. En la temporada 52/53 se llevaron a cabo las incorporaciones de Lasuen, Mauri, Herrero, Guerrero, Espejín, Bomba y Ayala que consiguieron aportar toda su calidad al bloque ya existente anteriormente y llevaron al Real Jaén a subir directamente a Primera División tras ser campeones del Grupo II.

Durante la 53/54, el debut en Primera División trajo malos recuerdos deportivos para el conjunto blanco. A pesar de arrancar de manera sobresaliente, los hombres de José González, “Petit” Brand, se quedaron a final de temporada a un punto de la salvación y tuvieron que hacer las maletas rumbo a Segunda División de nuevo. El presidente Cándido Nogales Martínez dimitió al finalizar la campaña y no fue hasta la 55/56 de la mano del entrenador Tomás Arnanz Arribas cuando los jienenses volvieron a la máxima categoría del fútbol español.

En la 56/57, tras la destitución de Arnanz y la llegada de José Millán González al banquillo jienense, el Real Jaén salvó la temporada por un punto de diferencia con respecto al descenso. Dicen que el fútbol es generoso y devuelve lo que debe y en este caso este dicho se vio materializado dejando a los andaluces un año más en la categoría reina. Sin embargo, la siguiente temporada con el francés Louis Hon capitaneando el banquillo, el Real Jaén no logró salvar la categoría y volvió a caer a la Segunda División.

Foto: jaenenlamemoria

En las siguientes décadas, el equipo blanco sufrió para conseguir buenas clasificaciones a final de temporada y se ve relegado a Tercera División en varias ocasiones. Es en la década de los 70 y los 80 cuando el Real Jaén ocupó un mayor número de años plaza dentro de la Segunda División B del fútbol español. Fue precisamente a finales de los 80, cuando el club de la ciudad del Santo Reino vivió algunos de sus años más convulsos. La afición comenzó a desilusionarse al ver a su equipo entre Tercera y Segunda B y no fue hasta la temporada 96/97 y tras muchos intentos frustrados, cuando el Real Jaén volvió a la Categoría de Plata. Pero solo un año iba a durar la alegría a la entidad jienense. Aquel equipo compuesto por integrantes como Yepes, Nono, Cabanillas, Cidoncha, Izquierdo, Gallego, Chumilla, Herrero, Rueda, Puche II, Robledo, el argentino Basualdo o el tunecino Sellimi, no logró conseguir el reto de la permanencia y se vieron de nuevo en Segunda División B.

El siglo XXI se inició con el equipo de nuevo en Segunda División A. El conjunto dirigido por Braojos fue décimo y consumó una gran temporada. Sin embargo, fue en la siguiente cuando los blancos volvieron al pozo de la Segunda División B como colistas y con la obligación de afrontar su conversión a SAD. Una categoría que les atrapó durante la siguiente década y que estuvo muy cerca de costarle la muerte a este anciano al que su afición y las ganas de seguir luchando, llenaron de vitalidad para incluso lograr otra de sus grandes hazañas, la ansiada vuelta a Segunda División de la mano de Manolo Herrero en la 2013/2014. Sin embargo, otra vez la mala fortuna se alió con este equipo que vio como el descenso de cateogoría llamaba a la puerta al año siguiente.

Ahora, tras una temporada 2014/2015 que supuso un fiasco deportivo para la entidad, el club y su afición quieren ir de la mano para emprender un nuevo proyecto deportivo con Gonzalo Arconada al mando del banquillo y con Rafael Teruel en la presidencia. Porque este histórico de nuestro fútbol, está alimentado por más de 4000 corazones que se siguen abonando a un sueño. Un sueño que solo gracias a la ilusión y el trabajo de un grupo de futbolistas puede volver a hacerse realidad.