La SD Gernika ha anunciado oficialmente la contratación por una temporada de Aboubacar Diarra, defensa de Malí que acaba de cumplir 22 años, y que por tanto ocupará una de las plazas sub23 del equipo vizcaíno. El jugador africano, de 1'85 m., ocupa la posición de defensa central, una posición que el técnico de los de la Villa Foral, Jabi Luaces, precisaba reforzar para dar alternativas al habitual eje de la temporada pasada formado por Carracedo y Koldo Bersalauce.
Diarra es un jugador polivalente que puede desempeñar el rol de pivote por delante de la defensa gracias a su presencia física y buen juego aéreo, o incluso de lateral izquierdo, aprovechando su velocidad y sentido de la anticipación. A pesar de su juventud atesora cierta experiencia en el grupo 2 de la categoría de bronce, donde suma 36 partidos en tres equipos diferentes. Tras forjarse en las categorías inferiores de la SD Eibar, en cuyo equipo juvenil compitió en División de Honor, llegó a entrenar una vez por semana a las órdenes de Gaizka Garitano, y disputar con el primer equipo de los de Ipurúa algunos amistosos.
En 2013 la entidad armera acordó su traspaso a la Real Sociedad, con cuyo segundo equipo debutaría en 2ª División B con apenas 19 años en el estadio de Butarque. En enero de este año, y tras dos temporadas y media con el filial txuri urdin, Diarra recalaba como cedido en el Amorebieta de Carlos Docando, aunque sólo disputaría un partido hasta final de campaña.
Se da la curiosa circunstancia de que el futbolista africano se convertirá no sólo en el primer jugador extranjero de la plantilla del Gernika, sino también el primero no oriundo de Euskadi en un plantel donde 19 de sus integrantes son vizcaínos, uno de Álava y otro de Guipúzcoa.