De Liverpool  a Nápoles con paso por Valladolid y Albacete. De vuelta con amigos. Ese es el viaje de Antonio Gómez desde que es entrenador de fútbol. El que fuera entrenador del Albacete Balompié en las dos últimas campañas se vuelve a reunir con Rafa Benítez en un banquillo, en este caso del conjunto napolitano.

Ya fueron compañeros en un banco en la etapa de Benítez en el banquillo de Anfield Road. Gómez abandonó la sociedad, por su gusto de ser máximo regidor de la parcela deportiva, para entrenar en el Nuevo José Zorrilla. Al frente del banco vallisoletano no duró más allá del mes de noviembre del mismo año de su contratación.

Poco después el madrileño fue designado entrenador del Albacete Balompié. Al frente del conjunto del Carlos Belmonte no ha conseguido el máximo objetivo que no era otro si no sacar al conjunto albaceteño del fatídico pozo de la Segunda División B. En su último año quedó eliminado por el Real Oviedo en la primera ronda de los playoffs de ascenso a la división de plata.

La mayor parte de su staff técnico estará compuesto por compatriotas suyos. Desde al propio Gómez, a Pedro Jiménez Campos en el análisis de los rivales o Xavi Calero, preparador de porteros entre otros tantos.