Es el partido del grupo 2. España e Italia, las dos máximas aspirantes a la clasificación mundialista, se enfrentarán en el campo de fútbol de Matapiñonera (Madrid). Tanto transalpinas como españolas, estas últimas con un partido menos, han ganado todos los choques disputados hasta la fecha, por lo que del resultado de este encuentro puede depender la resolución final.

Las pupilas de Ignacio Quereda llegan a la cita más importante con la moral reforzada tras la abultada victoria frente a la débil Estonia, a la que derrotaron por 6-0 esbozando sobre el terreno de juego un planteamiento distinto al habitual. Tanto el juego como el resultado dejaron “satisfecho” al seleccionador nacional. Pero ahora llega la prueba de fuego, recibir a una de las potencias europeas en fútbol femenino.

Vuelta a la normalidad

Tras el ofensivo 4-1-4-1 que dibujó Ignacio Quereda el pasado domingo, con la joven Virginia Torrecilla sosteniendo el centro del campo en solitario y un potencial atacante digno de admiración, presumiblemente todo volverá a la normalidad ante Italia.

El clásico 4-2-3-1 parece la opción más factible para enfrentarse a un rival de las características transalpinas. De este modo, se volvería al doble pivote, en el que Vicky Losada, en un gran estado de forma, o incluso Nagore Calderón, regresarían al once titular para acompañar al pulmón Virginia Torrecilla en el centro del campo y adjudicarse la batuta ofensiva.

Vicky se presume como acompañante de Virginia Torrecilla en la vuelta al 4-2-3-1

La máxima perjudicada por el nuevo cambio de sistema será Natalia Pablos. La delantera del Bristol Academy, que regresaba a la selección tras seis años de incomprensible ausencia, ocupó la punta de lanza ante el combinado estonio, al que además endosó un gol de bella factura. Pero la acumulación de talento ofensivo que actualmente posee España la relegaría al banquillo. Todo un lujo.

Otra de las dudas se cierne sobre el eje central de la defensa. Ante Estonia la pareja de la bilbaína Irene Paredes fue Miriam Diéguez, mediocentro en el Barcelona pero habitual central con la selección. Ruth García, una de las capitanas del combinado, se sentó en el banquillo. Su vuelta al once en un partido de máxima exigencia debería ser clara, pero el gran inicio de temporada de Miriam también puede haber convencido al seleccionador. Lo único seguro es que la solidez defensiva y el toque y circulación de balón serán los principios en los que se base el combinado nacional para derrotar a Italia.

Una Italia bregadora que siempre cumple

Italia acumula seis de seis puntos posibles en la clasificación mundialista. Las chicas de Antonio Cabrini no tuvieron piedad ante Estonia en el primer partido, a la que derrotaron por 1-5. Sin embargo, sí encontraron más problemas al enfrentarse a Rumanía, imponiéndose con un solitario gol sobre la bocina de Cristiana Girelli.

Ahora llega la verdadera prueba de fuego para las futbolistas transalpinas. Visitar a España significará luchar por el liderato del grupo y, por ende, la clasificación mundialista. Pese a que cuentan con tres puntos de ventaja sobre la Roja, esta última todavía tiene pendiente tres puntos por disputar.

La ausencia más destacable con respecto al equipo que alcanzase los cuartos de final en el pasado Europeo es Patrizia Panico. La excelente delantera italiana, ya con 38 primaveras, ostenta escandalosas cifras goleadoras en su trayectoria futbolística (con la selección 96 goles en 188 partidos) por lo que, pese a no estar presente, es y será una leyenda del fútbol femenino que nunca se olvidará.

El estilo de juego italiano es bastante práctico. Con una defensa sólida y muy correcta tácticamente, se aprovecha de la calidad de sus futbolistas ofensivas para desequilibrar las contiendas.

Italia basa su juego en una defensa sólida y el desequilibrio de sus jugadoras ofensivas

El once que pueda disponer Cabrini es toda una incógnita. Tras las probaturas realizadas contra Estonia, ante Rumanía apostó por un ofensivo 3-1-4-2, algo bastante improbable a la hora de enfrentarse a una España que tendrá la posesión y cuenta con jugadoras veloces y técnicas. Con D´Adda, ausente de la Euro por lesión, y Manieri como fijas en la zona defensiva, lo más seguro es que Salvai y Di Criscio o Bartoli las acompañen en una rocosa línea de cuatro. El centro del campo será competencia de Tuttino y Stracchi, dos jugadoras de mucho trabajo que ayudarán a consolidar el entramado defensivo.

Ofensivamente hay que destacar a Gabbiadini, una jugadora capaz de marcar diferencias y cambiar el decorado de cualquier partido. Con la trabajadora Mauro a su lado, y asistida por la calidad de Camporese y la potencia de Ianella en banda, la atacante del Verona será el gran peligro transalpino.

Irene Martín: “En Italia saben que el fútbol femenino español ha crecido mucho”

Sobre la opinión internacional que Europa tiene de la selección española tras la disputa de la pasada Eurocopa habló Irene Martín, la única futbolista nacional que en la actualidad actúa en la liga italiana, más concretamente en el Riviera di Romagna.

Irene sostiene que “en Italia saben que el fútbol femenino en España ha crecido mucho en los últimos años y ya no se la tiene como un rival fácil”, sobre todo tras la disputa del campeonato continental. “El estilo de juego de la selección en el Europeo gustó mucho; se la tiene más respeto si cabe”, comenta la centrocampista.

Pamela Conti, exinternacional italiana, también opinó sobre el partido estrella del grupo 2 en una entrevista concedida al diario deportivo As. “Italia a nivel defensivo es mejor. Sin embargo, España es mejor tácticamente. La velocidad y la técnica de España, Italia no las tiene”, argumentó la futbolista.

Posibles alineaciones


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