Los de Luís de la Fuente han logrado este lunes su pase para las semifinales del Campeonato Europeo Sub-19. Su próximo rival será la imbatida Francia, que ha quedado primera en el grupo A. España, segunda tras Rusia, ha obtenido cuatro puntos de nueve posibles, al igual que las otras tres selecciones rivales del grupo B. A pesar del empate a goles con los rusos, estos pasan como primeros de grupo tras la derrota que infligieron a la Rojita por 1-3.

Dani Ceballos y Marco Asensio: combinación perfecta

Arrancaba el partido en Grecia y Luís de la Fuente no variaba el dibujo de juego de sus pupilos con un 4-2-3-1 sobre el césped. La primera llegada al área se produciría por parte de los holandeses, pero sin ningún peligro para el guardameta español, Antonio Sivera. La defensa rival se encontraba adelantada, con una fuerte presión arriba que dificultaba la llegada de los españoles a la portería rival. Sin embargo la Rojita se puso las pilas y sacó su juego a relucir. En el minuto 8 tras una gran triangulación entre Marco Asensio, Dani Ceballos y Mayoral, España conseguía adentrarse en el área y aunque el delantero madridista, Mayoral, no llegaba a rematar, lo hacía Miranni en propia puerta, adelantando así al combinado nacional español en el marcador.

A los pocos minutos, Pedraza pudo tener el dos a cero en sus botas tras un uno contra uno, que el portero holandés adivinaba parando el chut del español con el pie. Holanda se ponía nerviosa, en los primeros veinte minutos de partido los jugadores neerlandeses realizaron tres faltas, frente a ninguna del combinado español. Se continuaron las faltas de Holanda y en una de ellas Marco Asensio, uno de los nombres clave del partido, propino un potente tiro a la escuadra que se marchó fuera de la portería por muy poco. La Rojita lo intentaba, quería lograr ser primera de grupo pero no conseguía aumentar la distancia en el marcador.

Incesantes pero sin suerte

Pasada la primera media hora de encuentro y tras un "Cooling Break" pedido por el entrenador holandés, empezaba a apretar un poco más la selección rival. A pesar de esto, el valencianista Sivera no tuvo gran peligro en su área. Por otro lado, era Dani Ceballos quien se encargaba de generarlo al otro lado del campo. Ya en el añadido de la primera mitad, España se daba cuenta de que el lateral izquierdo holandés flaqueaba en sus labores de defensa y en apenas dos minutos se produjeron dos llegadas al área por banda nacidas en las botas de Aaron Caricol. Finalmente, la selección Española se marchaba al descanso con el marcador a favor.

Al poco de empezar el segundo tiempo, las cosas comenzarían a torcerse. En el 53', el colegiado señalaba lo que parecía ser un dudoso penalti sobre un jugador holandés por parte de Meré. Tanto el defensa español como el guardameta Sivera lo protestaban. El delantero Van Amersfoort transformaba la pena máxima procurando un disparo raso a la izquierda del portero español. Se igualaba así un marcador que no sufriría más cambios en lo que restaba de partido.

Tras unos minutos de confusión en los que España dejó de ser ella misma y  perdió toda intensidad y control del juego, los pupilos de Luís de la fuente comenzaron a mandar otra vez con el balón, estando bien posicionados en todo momento. Pero a pesar de los numerosos intentos de Dani Ceballos, el jugador del combinado español más destacado del encuentro, que trataba junto a sus compañeros de aumentar la distancia en el electrónico tanto desde fuera del área como entrando hasta la cocina, no hubo manera de cambiar el resultado.

El choque entre España y Holanda terminó con un empate a uno, que otorga el pase a semifinales a la Rojita como segunda de grupo. El próximo jueves se enfrentará a la selección más dura hasta ahora en el campeonato, Francia. Ante sí, esta generación sub-19 tiene un más que complicado reto.