Vuelve la Eurocopa, vuelve un torneo muy ligado a la selección española. La roja tiene  feeling con este torneo ya que defiende, otra edición más, título. Tras ganar en 2008 y 2012, las dos últimas, los de Vicente Del Bosque vuelven, pues, a su torneo más atractivo en estos tiempos que corren. A pesar del descalabro de 2014 en el Mundial de Brasil, la simpatía hacia este campeonato atrae mucho el sentimiento de los españoles que llegan a Francia con muchas ganas de reválida por el mundial y con la motivación de conseguir la tercera Eurocopa seguida.

Tiempo de transición, equipo sin cuajar

A pesar de los cambios y de lo visto en el mundial de hace dos años, la selección española sigue integrada en los favoritos al título. Ya no es la temida España de hace varios años, pero sigue teniendo la vitola, por lo menos fuera de nuestro país, de favorita junto a otras. El equipo español llega en pleno cambio, en plena metamorfosis. Un ciclo que está prácticamente finalizado y plantilla prácticamente nueva, pese algunos grandes héroes del pasado que perduran como Iker, Ramos, Silva o Iniesta.

Desde que España está en la cima, una cima menguada por el desastroso mundial, nunca antes se había vivido un campeonato con tanta reforma. A pesar del mal resultado del Mundial de Brasil, el equipo conformado era prácticamente el mismo que ganó el mundial. La misma base, prácticamente misma plantilla, pero con un rendimiento ajado y erosionado. Es por primera vez, desde que Casillas levantara la Euro 2008 de Austria y Suiza, en aquel comienzo de la época dorada, que se renueve tanto una plantilla. Se busca nueva era y la Eurocopa 2016 es el comienzo de quien sabe qué.

De 2012 a 2016

Rodaje sin hacer

Es la diferencia más grande y la que más asusta de esta España de “Del Bosque 3.0”. Es la España, de esta generación contemporánea, más renovada, cambiada, innovada y rejuvenecida. Lavado de cara tras la pérdida de varios pilares de la gran generación de éxito y juego. Ello hará que la España que se aprecie en Francia 2016, seguramente no sea la más efectiva en cuanto a juego, perfil, estilo o consecuciones.

La España de 2012 venía a toda velocidad de ganar el Mundial y en punto máximo de maduración, la actual selección es joven e inadaptada.

La Eurcopa 2012 se pudo ver a una España tan rodada, que atropelló a todo el que se puso por delante. El juego era una coreografía ensayada desde cuatro años atrás, los recursos eran reflejos involuntarios del subconsciente, los goles y las llegadas eran consecuencia de un equipo más que trabajado y conocido. Una familia que había conseguido del gran juego, un equipo ganador.  Una apisonadora que jugaba de memoria, fruto de los años precedentes. La España actual aún tiene que adaptarse y asentarse en juego y jugadores.

Pérdida de juego constructivo en metros iniciales

El perfil de esta España pasa por seguir, en gran cuantía, el mismo estilo que ha dejado la mejor España.  El perfil y el tipo de juego no parece que vaya a dejar de intentar pese a que no estén los motores de aquellas épocas. Juego de combinación, de toque, de creación, de centralización y elaboración. Madurar jugadas, juego de posesión. El vaivén de movimientos, jugador o balón, seguirá siendo en todo el eje central.

Sin embargo España tendrá otra zona de cocción de jugadas. El juego de España por razones de jugadores, por estilo de sus integrantes, se verá afectado en su creación. Busquets de mediocentro defensivo y Silva e Iniesta de interiores más alejados seguirán patentes. Incluso Andrés podrá ver retrasada su posición para asumir el papel más de creador lejos del área. Los dos interiores primarios seguirán existiendo, por supuesto, la táctica no varía. Varíarán los integrantes.

Con Xavi y Alonso, la maduración de las jugadas y la creación comenzaba unos metros más atrás de lo que lo hará con los Koke, Isco o Thiago

Sea Iniesta con Koke, sea Iniesta con Thiago, Sea Koke con Isco, Sea Thiago con Cesc. Sea como sea, lo que queda claro es que el juego no será tan madurado y la creación no será tan atrás como con Xavi y Alonso. Los mediocentros que acompañaban a Busquets en 2012, esencia pura de la mejor España, iniciaban su juego en línea de medios. Su juego era de calma, de tempo, de latido, de pausa. Poca conducción. Lo que viene en la actualidad, los Isco, Thiago, Koke, son jugadores más directos, de conducción, de llegada, de último pase en la cercanía del ataque. La creación, así pues, se verá adelantada unas líneas de lo que tenía acostumbrados Xavi y compañía.

La eterna búsqueda del delantero

Si  algo puede parecerse esta selección a la de 2012 eso es en la posición del “nueve”. Ya sin Villa,  el torneo de hace cuatro años y este que comienza en breves, careció y carece de un nueve o figura goleadora segura y asentada. En la Eurocopa de Ucrania, Del Bosque bailó con las figuras de Torres( máximo goleador del torneo), Negredo y el famoso “falso nueve”. No hubo un jugador que se fijara en ese puesto tan frágil últimamente.

Para esta Eurocopa de  Francia la subasta ha sido enorme. La plaza de nueve ha sido la más dudosa de los últimos tiempos y eso dice mucho de la falta de un referente fiable y de garantías. Tan solo han sido elegidos dos delanteros centros, lo que es muy probable que la opción del falso nueve sobrevuele la cabeza del seleccionador. Morata y Aduriz son los representantes del delantero centro en esta España, elegidos por delante de Torres, Diego Costa o Alcácer. El del Athletic y el de la Juve juntan 11 partidos y dos goles con la roja.

Plantilla

Portería: Parece el año definitivo del relevo. Una leyenda en horas bajas como Casillas dejará el puesto a uno de los mejores porteros de la actualidad, De Gea. Reflejos, envergadura y mucha agilidad. Falta demostrar todo lo que ha demostrado  y aparecer lo que apareció el Santo de Móstoles.

Defensa: Mejores noticias en este sector respecto hace cuatro años. El lateral derecho llega mejor cubierto tanto con Juanfran como con Carvajal. Piqué llega seguramente mejor que hace cuatro años ya que llega en un momento de forma impecable. La defensa llega mejorada.

Medio: Busquets e Iniesta siguen siendo claves e imprescindibles. Sin embargo en esta Eurocopa no estarán Xavi ni Alonso. España trae tres jóvenes joyas con esperanza de herencia, pero con perfiles más distintos. Calidad sigue habiendo, la ejecución, las decisiones y la  influencia es la incógnita.

Delantera: Una casa de locos. El puesto atacante es la más cambiante de esta selección y llegan a esta Euro dos delanteros que no estuvieron en la Eurocopa pasada, y ni siquiera en el Mundial intermedio. Morata y Aduriz remplazan a Torres y Negredo (Llorente no jugó ni un solo minuto). Los perfiles son bastantes parecidos, un delantero potente y de juego a la espalda, y otro rematador y con gran juego de espaldas. Nolito aparece como gran cambio y jugador diferencial por el exterior. Interesante y enigmático.