Ganó el Sevilla en El Madrigal en el último partido del año. Emery consiguió vencer en su particular duelo a Marcelino, ganando con tantos de Cala y Bacca. El Sevilla, muy sólido en defensa, fue de menos a más, con salidas a la contra y buscando jugadas a balón parado. Perbet puso el 1-2 a falta de tres minutos para el final.

No fue un partido fácil para el Sevilla, pues teniendo en cuenta el juego del Villarreal se esperaba que los locales llevaran el peso del partido, aunque les faltó Cani, su brújula. El aragonés no llegó a tiempo para el partido, aunque sí Bruno Soriano. Pero él sólo no pudo crear el juego suficiente para llegar arriba, destruido por Carriço e Iborra en el mediocentro sevillista.

A la espera

El Sevilla, con las bajas en defensa de Diogo y Alberto Moreno, comenzó el partido dándole el balón al Villarreal, que tocaba la pelota con miras hacia la portería de Beto. Los hispalenses salían rápido a la contra, y a la mínima ocasión que tenían, se hacían notar. Primero Rakitic y después Bacca, fueron los que dieron las primeras muestras de peligro sevillista, con sendos disparos desde fuera del área.

A balón parado

Fue lo más destacado de la primera mitad. Avisaba el Sevilla con un saque de esquina que peinaba alto Carriço. Era el preludio del 0-1, obra de Cala en el 23’. De nuevo funcionó la estrategia del entrenador sevillista. Rakitic colgó un balón desde la zona de tres cuartos para que Cala, escorado, elevase de cabeza el balón por encima de Asenjo, un gol bastante similar al que marcó Fazio hace unas jornadas en Cornellá.

Cuatro minutos después llegó la respuesta del Villarreal, con tiro de Manu Trigueros que Beto mandó a córner. Y minutos después la volvió a tener el cuadro amarillo, con un cabezazo desviado de Aquino. El Sevilla se quitaría la presión con otra jugada a pelota parada. Colgó Rakitic, continuó Iborra y no llegó Bacca en boca de gol. Perdonó al final de la primera parte el colombiano.

Fútbol y ocasiones

El equipo local comenzó el segundo acto con presencia en el área de Beto. Metiendo atrás al Sevilla, tuvo la mejor oportunidad en una falta de Dos Santos que salió rozando el poste izquierdo de Beto.

Tras esto vino la respuesta del Sevilla que bien pudo sentenciar el partido. Bacca cabeceó al larguero y Rakitic acarició el tanto en un lanzamiento de falta. Beto volvería a aparecer en el 70 para despejar un tiro libre de Trigueros.

Bacca aumenta la ventaja

El colombiano anotó el segundo tanto para el Sevilla tras un centro de Rakitic que Musacchio no acertó a despejar. Dejó la pelota muerta y Bacca estuvo atento para atacar la pelota y batir a Asenjo. Desafortunado fallo de Musacchio que sirvió para declinar la balanza del lado sevillista.

Tras el gol el Sevilla controló el partido. Esperando atrás sin sufrir en demasía los envites del Villarreal, con más corazón que cabeza. Los locales tendrían su oportunidad a falta de 3 minutos para el final.

Minutos de suspense

El tanto de Bacca pareció matar el partido, pero un penalti -y expulsión- de Cala en los instantes finales hizo que el partido acabara con emoción. Perbet transformó la pena máxima, haciendo que los últimos minutos fueran de nervios en la escuadra hispalense. Finalmente aguantó y se llevó la victoria para Sevilla.


Con esta victoria el Sevilla logra mantenerse en la séptima posición, igualado con la Real Sociedad, que marca la zona europea. El próximo compromiso sevillista será el 5 de enero ante el Getafe en el Sánchez Pizjuán a las 12:00.

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