Unai Emery ha comentado en rueda de prensa la motivación que tenía el equipo ante la posibilidad de remontar al Oporto, algo que se ha demostrado en el terreno de juego: “Los jugadores transmitían buenas sensaciones y eso se palpaba. Sabíamos de la dificultad que tenía el eliminar al Oporto. Éramos conscientes de que debíamos tener respeto al rival, pero sin que ellos nos agobiara. Queríamos dar el paso adelante y lo hicimos”. Aunque el Sevilla ha salido con fuerza, el técnico sabía que los lusos no iban a bajar los brazos en ningún momento aunque se vieran con un resultado en contra inesperado: “Con un 3-0 en el minuto 29 se puso todo de cara. Evidentemente no estaba en el guión previsto. Pero incluso así sabíamos que teníamos que sufrir para pasar. En la segunda parte, con un hombre menos, estuvimos muy bien”.

Ahora toca centrarse en el próximo derbi, esta vez en Liga y en el Benito Villamarín: “El otro día me preguntaban por el Betis y no hablé. Ahora sí. Es el domingo a las 12 y apenas hay tiempo. Lo que nos queda es un camino precioso. Hay que sacar el mayor rendimiento partido a partido. No sé qué jugadores tendremos disponibles de los que han jugado hoy. Seguro que alguno no”.

Pasando al tema de un hipotético rival en semifinales, Unai Emery no tiene ninguna preferencia: “¿Rival en la Liga Europa? Yo no voy a elegir. Que sea el sorteo el que lo diga”. También habló sobre lo “atractivo” que resultaría que tocara su ex equipo, el Valencia. Pero el entrenador sevillista solo quiere llegar lo más lejos posible con los suyos en una competición muy importante en la historia del club: “Desde la ilusión que tenemos en esta competición ya estamos contentos. Sobre todo por la afición. En aquellos momentos, cuando jugamos con el Pogdorica, ya vimos cómo estaba la afición. Hay que recordar también el viaje a Estoril, donde hubo 5.000 aficionados”.

Sobre su labor en el Sevilla, que en su momento fue muy cuestionada, Emery no se preocupa de lo que digan y piensa en llevar lejos a este equipo: “Yo no me detengo cuando las cosas van mal y ahora tampoco. Soy como un trapecista. El domingo tenemos un test importantísimo. A mí, ya lo he dicho,  me gustaría jugar algún día la Champions League con el Sevilla”.

 Por último, la prensa quiso saber más sobre la fiebre con la que Rakitic afirma haber jugado el partido: “Tenía unas décimas por la mañana, pero nunca fue duda. Él quería jugar y mirad lo que ha hecho. ¿Baja para el derbi? Hay que ver cómo evoluciona”.

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