El Sevilla FC está en estado de gracia. Sus últimos partidos se cuentan por victorias, goleadas cuando le toca jugar de local, y el Granada ha sido la última víctima de la gran racha del equipo hispalense. Mainz (pp), Gameiro, Mbia y Vitolo fueron los autores de los goles de un Sevilla que supo aprovecharse de los errores de la zaga visitante.
El equipo nervionense salió de inicio con: Beto, Fazio, Fernando Navarro, Carriço, Marko Marin, Rakitic, Gameiro, Vitolo, Pareja, Mbia y Coke.
El once inicial del Granada estuvo formado por: Karnezis, Nyom, Mainz, Olori, El Arabi, Brahimi, Recio, Brayan Angulo, Iturra, Coeff y Piti.
El Sevilla no salió con la intensidad de los últimos partidos, y le costó llegar al área rival en los primeros instantes del encuentro.
Ante la falta de ocasiones, el equipo de Emery se encontró con la suerte. Gameiro se adentró en el área y Mainz, en contra de su voluntad, envió el balón al fondo de la red sin que Karnezis pudiese hacer nada.
El Granada intentó reaccionar, y a punto estuvo de encontrar la igualada. Una buena combinación en la frontal del área de Beto acabó con un derechazo de Recio que, en buscar de la escuadra, acabó marchándose ligeramente alto. Fue uno de los pocos disparos que se pudieron ver en la primera mitad.
Tras el paso por vestuarios, el Sevilla volvió a encontrar en la defensas granadina un aliado. Ilori cedió el balón a Karzenis en una jugada donde el meta ya había salido de su portería. Era el segundo gol en propia puerta del Granada, pero Gameiro consiguió empujar el balón sobre la línea para apuntarse el tanto. Sin disparar a puerta, el Sevilla ya ganaba 2-0.
Y ante tanta colaboración, los hispalenses decidieron terminar de sentenciar el encuentro. Esta vez sí; buen centro desde la derecha de Gameiro que Mbia, en el segundo palo, envía a la red. El camerunés celebró su tanto de una forma peculiar.
El partido siguió su curso con un Granada ya con los brazos caídos, y que en ningún momento llegó a dar signos de remontada, mientras el Sevilla buscaba cerrar la goleada con un Marko Marin muy activo.
Y lo consiguió, cómo no, con otro gol que contó con la colaboración de defensa del equipo de Alcaraz. Ninguno de sus jugadores logró despejar un balón que, tras varios rebotes, acabó en los pies de Vitolo, que se encargó de cerrar el marcador con el 4-0 definitivo.
Tras el partido, en sala de prensa, Lucas Alcaraz aseguró que se han enfrentado a "la tercera mejor plantilla de la Liga"
Emery, pensando ya en la Europa League, dijo que "tenemos pensado hacer grande algo en Europa"