El Sevilla se ha reencontrado con la victoria ante su gente merced a un Granada que opuso más resistencia de la que muestra el marcador, pues los granadinos se fueron con empate al descanso. Tras tres partidos seguidos sin ganar, los de Nervión vuelven a la senda del triunfo gracias a los cuatro goles de la segunda mitad, dos de ellos en los últimos minutos, que prolongan así la nefasta racha de un equipo cuyo entrenador, Caparrós, empieza a estar en entredicho.

El partido comenzó con homenaje del Sevilla a sus ídolos de la década de los 70.

Caparrós, que volvía a que fue su estadio, salió de inicio con: Roberto, Fran Rico, Babin, Javi Márquez, El Arabi, Piti, Iturra, Sissoko, Juan Carlos, Foulquier y Murillo.

Desde la grada de Gol Norte del Sánchez Pizjuán se homenajeó al ultra del Deportivo fallecido durante la mañana del mismo día en los aledaños del Calderón.

El partido comenzó con el Sevilla como protagonista del balón, ante un Granada que buscaba defender juntando las líneas para salir luego rápido a las contras.

Bacca estuvo a punto de adelantar a los suyos en una jugada donde, finalmente, Juan Carlos acabó sacando el balón bajo palos.

Pero minutos después, el colombiano volvió a ser protagonista, esta vez encontrando portería. Bacca fue el más listo en una jugada loca dentro del área, donde el Granada reclamó falta de Krychowiak sobre el meta Roberto, pero el gol subió al marcador.

El '9' del Sevilla celebró con sus gestos habituales el primer tanto del partido, además de acercarse hasta para celebrarlo con Emery y sus ayudantes.

Sin una reacción inmediata, el Granada fue adelantando líneas de forma progresiva, aunque no creaba ocasiones de gol claras sobre la portería de Beto.

El central Babin tuvo que ser atendido e incluso grapado en la banda tras un choque fortuito dentro del área.

El Granada consiguió la igualada desde los once metros, tras una falta sacada en corto donde M'Bia tocó el balón con la mano dentro del área. El Arabi no fallo el penalti y puso el empate en el marcador tras batir a Beto.

Ya en la segunda mitad, el Sevilla buscó con más ahínco ponerse por delante en el marcador, ante un Granada que, poco a poco, fue reculando y metiéndose en su propia área.

Reyes asistió a Banega para que este remara al palo y, en el propio rechace, mandara el balón al fondo de la red para volver a poner a los suyos por delante. El argentino celebró su primer tanto como sevillista por todo lo alto.

La reacción del Granada fue tímida, y el Sevilla acabó avasallando al rival en los últimos diez minutos. Bacca firmó su segundo tanto de la tarde tras otra asistencia de Reyes desde la derecha. El colombiano controló dentro del área, fusiló e hizo el 3-1.

Con todo resuelto, los de Nervión siguieron buscando aumentar la goleada. Y lo consiguieron en el tiempo de descuento.

Primero, M'Bia hizo el cuarto en el minuto 90' tras una asistencia de Gameiro, que había sustituido a Bacca.

Tras eso, ya en el 92', el propio Gameiro cerró la goleada tras una asistencia de Vitolo desde la banda derecha del ataque local.

El Sevilla se reencuentra así consigo mismo y vuelve a sumar de tres en tres, volviendo a encontrar las buenas sensaciones y dejado muy tocado al entrenador de un Granada que está a un solo punto del descenso.

En sala de prensa, Caparrós aseguró que "el resultado había sido demasiado abultado" .

Por su parte, Emery se mostró satisfecho y destacó la figura de Reyes como "importante en el partido".

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