El Sevilla cerró de la mejor manera posible la penúltima semana de competición del año. Los andaluces, tras endosar sendas 'manitas' a Granada y Sabadell, llegaban a Vallecas con la obligación de ganar para seguir manteniendo el cuarto puesto, algo que consiguieron gracias a un tempranero gol de Bacca, gestionando la ventaja hasta el final del partido.

Presión en tres cuartos

Bacca adelantó a los andaluces a los siete minutos de partidoComenzó con fuerza el Sevilla, presionando en zona de tres cuartos ante la adelantada zaga dispuesta por Paco Jémez. Frente a ese planteamiento, fueron varios los balones lanzados a la espalda de la defensa rayista, aprovechando Bacca uno de ellos en los primeros minutos. Carriço lanzó en largo y el colombiano se metió por detrás de Amaya para tocar con la cabeza y salvar la salida de Cristian Álvarez, anotando el 0-1 a puerta vacía.

Pero no se quedó ahí el ímpetu sevillista, que continuó con seriedad en estos primeros compases, nublando las ideas de un Rayo que apenas podía pasar del centro del campo. No obstante, los esfuerzos se contuvieron, en vistas que la gasolina a esas revoluciones no iba a durar todo el partido, dejando al Rayo atisbar la portería de Beto, aunque el portugués no sufrió en demasía en este primer acto.

Los de Jémez lo intentaron con varios centros por la derecha, destacando la participación de Quini, aunque ninguno tuvo un buen final. Otro método fueron las jugadas a balón parado, destacando un lanzamiento frontal de Kakuta que atrapó el meta luso.

Frenética reanudación

Ocasiones al comienzoEl guión en la segunda parte fue similar, con un inicio de ritmo alto que fue decayendo con los minutos. Quiso zanjar el partido el cuadro de Unai Emery cuanto antes, con una buena oportunidad de Vitolo, que no logró acertar en el mano a mano con Cristian Álvarez. Fue la oportunidad más clara del correcalles inicial, pero antes de esto ya la había tenido Baptistao, que cruzó en exceso su disparo.

Reyes y Kakuta fueron los siguientes en probar. Primer el utrerano, de falta, la cual se envenenó hasta casi sorprender al arquero, que lanzó a córner. Tras ese saque de esquina, contragolpe rápido del Rayo en el que Kakuta no llega a controlar bien ante el portero sevillista.

Abierto el partido, le tocaba responder al Sevilla, en botas de Coke, con un disparo que despejó bien el arquero. Bastante trabajo del meta argentino, que logró que su equipo llegara con vida a los últimos instantes. Tras ese primer cuarto de hora frenético, los equipos se dieron una tregua hasta el final.

El Rayo apretó al final

No obstante, el descanso lo tomó el Sevilla hasta el final, que confió en defender la ventaja, algo que a la postre le saldría bien, pero no sin sufrir. Manucho tuvo la última oportunidad a cinco minutos del final. El angoleño remató libre de marca en el segundo palo por encima del larguero.

Una última agonía fue la expulsión de Carriço por doble amarilla, aunque los andaluces supieron aguantar los pocos minutos restantes hasta el pitido final para lograr su segunda victoria consecutiva.

Por tanto, el Sevilla dormirá una semana más en puestos de liga de campeones, lo que le dará moral para afrontar la primera final de la temporada, este jueves ante el Rijeka en la Europa League. El domingo, ya en liga, cerrará la competición de este 2014 con el encuentro ante el Eibar.