2014 ha sido un año especial para el sevillismo, como 2006 y 2007. Estos periodos tienen un factor en común recordado por cualquier sevillista, la UEFA Europa League. Middlesbrough, Espanyol y Benfica este año, las víctimas. El premio, volver a estar en el olimpo de los mejores equipos del viejo continente.

Mal inicio

El año comenzaba con una doble vertiente negativa, ya que hubo dos sucesos en diciembre de 2013 que perturbaron al sevillismo. El primero fue la dimisión de José María del Nido, que terminó zanjándose con el nombramiento en enero de José Castro como nuevo máximo mandatario del Sevilla. Por otro lado, la vía deportiva tenía el duro recuerdo de la eliminación en la Copa del Rey ante un Segunda B, el Racing de Santander, por lo que se hacía imprescindible mejorar la clasificación liguera, y para ello el equipo comenzó ganando por un claro 3-0 al Getafe, aunque fue, junto con el empate en el Calderón, los único positivo de un mes de enero con demasiadas irregularidades.

Antes del punto logrado en el Calderón se sumó otro punto en Elche, algo no tan bien visto. Lo siguiente fue una derrota en casa ante el Levante (2-3) de Caparrós. Esos malos números hicieron que la sexta plaza se alejara hasta los cinco puntos de distancia, algo comprendible respecto a los números, cinco sobre doce en un enero que trajo consigo, además, la ratificación en el cargo de presidente de José Castro.

Febrero no comenzó tampoco con buen pie, ya que los de Emery cayeron en La Rosaleda ante el Málaga por 3-2 y ante el Barcelona en Nervión por 1-4, agravado con el empate ante el Valencia, también en casa. Este fue uno de los peores momentos de Emery como entrenador, puesto que el nombre de Caparrós planeaba sobre el banquillo sevillista después de una racha que se extendió hasta los seis encuentros sin conocer la victoria.

La Europa League, como agua de 'febrero'

Conocido es el dicho de lo necesario que son las aguas en mayo para los cultivos, pero este 2014 esa lluvia se adelantó unos meses, pèrmitiendo a Emery salir de esa picota en la que se había metido casi sin darse cuenta. Esas gotas de aire llegaron a través de la Europa League, con un empate en Eslovenia ante el Maribor, confirmado en la vuelta con una victoria. En medio, una victoria ante el Rayo en Vallecas, y otros tres puntos sumados ante la Real Sociedad. Fue un cierre de los dos primeros meses con un poco de luz hacia tan mal inicio de año.

Marzo trajo consigo un apasionante derbi europeo en la Europa League, el cual será recordado por mucho tiempo en la capital hispalense, por ser el primero y por el desarrollo del mismo. Una semana entre partido y partido, pero el duelo había comenzado antes, desde que se supo en el sorteo que podía haber derbi, y lo hubo.

Con ida en el Pizjuán, los verdiblancos neutralizaron a un Sevilla que se fueron con un 0-2 en contra. Pero no estaba todo dicho, había que jugar un partido de vuelta, que acabó con idéntico resultado tras el partido. Sin vencedor en la prórroga, los penaltis dictaminaron que debía ser el Sevilla el que accediera a la siguiente eliminatoria.

Mientras, la liga continuaba, y los resultados sonreían a un Sevilla que cada vez estaba más fino de cara al tramo final de temporada, donde se decididen las cosas. Además, el mes de marzo trajo todo victorias en liga a excepción del último choque en Vigo ante el Celta (1-0). No obstante, eso no pesó en la decisión de nombrar a Unai Emery mejor entrenador del mes, pues sus jugadores habían derrotado a Almería (1-3), Valladolid (4-1), Osasuna (1-2) y Real Madrid (1-0). Resultados ilusionantes para luchar por todo en los meses finales de competición.

Donde se deciden las cosas

Aunque suene a tópico, a la frase no le falta un ápice de razón, pues abril y mayo, últimos meses de competición, son aquellos donde se deciden los títulos, a la par que los puestos europeos para el próximo curso. Así, este segundo trimestre deparó al Sevilla una bonita historia, aunque más bien ‘otro’ hecho que le volvió a colocar entre los grandes de Europa tras unas temporadas en las que su nivel había bajado. Inmersos en los cuartos de final de la Europa League, también tenía una batalla abierta en la liga, ya que la buena segunda vuelta había permitido que se acercara al Athletic de Bilbao en la pelea por el cuarto puesto.

Con esa mira comenzaba el mes de abril en el torneo liguero, a la par que alternaba con encuentros de UEFA Europa League. Dos partidos a la semana (jueves y domingo) que, en vistas de los resultados, no afectó en demasía el cansancio, aunque sí puede que llegara justito al duelo por la ‘Champions’ en Bilbao, donde fue atropellado por el Athletic. Antes había ganado con solvencia a Espanyol (4-1), Betis (0-2) y Granada (4-0).

Eso en domingo, pero en jueves había levantado la eliminatoria de cuartos de final ante el Oporto, que se le puso en contra en el choque de ida en Portugal, donde cayó por 1-0. En la vuelta remontó, y bien. Venciendo por 3-0 al descanso, apenas dio opción a un Oporto que maquilló la cuenta al final, aunque antes también había marcado Gameiro. Un 4-1 que metió al Sevilla en semifinales, donde esperaba el Valencia.

Había muchas ganas en la ciudad de que llegara el partido, recordando algunos las anteriores ante Schalke 04 y Osasuna, ambas superadas, pero con la vuelta en casa, siendo diferente esta vez. La ida se jugaba en el Pizjuán, en un partido que no defraudó, lleno de emoción, polémica y goles. 2-0 para los de Emery, una buena renta con la que ir a Mestalla.

Antes de la vuelta llegó el citado encuentro de San Mamés, donde el míster sevillista sacó un once con muchas rotaciones, como venía haciendo en la liga, dando prioridad a la competición europea, aunque los resultados también le estaban acompañando en el campeonato doméstico. La cita liguera entre Athletic y Sevilla era crucial para la participación en la máxima competición continental, y se la llevó el conjunto bilbaíno, en parte gracias a la victoria ante los sevillistas (3-1).

Dando por imposible la liga, y una vez asegurada la posición en Europa League para el próximo curso, tocaba centrarse en dicha competición, pero en la de este año. Tocaba viajar a Mestalla, donde el equipo estuvo acompañado por unos 5.000 aficionados, que vivieron en directo el milagro de MBia, beatificado desde entonces.

El Valencia había hecho los deberes, remontando con firmeza (3-0 parcial), y controlando un partido en el que el destino le deparó un duro final, a la par que dulce para los sevillistas. En la última jugada apareció el camerunés para rematar de cabeza en el área pequeña y hacer el gol sevillista que le daba el viaje para Turín por el valor doble de los goles fuera de casa. Helado se quedó Mestalla, solo alentada por la presencia de sevillistas. Nadie lo podía creer.

Turín, Turín y Turín

No había otro pensamiento en la mente de un jugador, miembro del cuerpo técnico, directivo o aficionado. Con dos semanas para la final, se contaban los días para que llegara. Mientras, quedaban más partidos de liga, aunque ya prácticamente olvidada. Un empate ante el Villarreal y una derrota en Getafe fue el preludio del 14 de mayo de 2014, el día de la tercera Europa League en nueve años.

Los hispalenses vencieron en la final por penaltis (4-2)El Sevilla supo plantarle cara al Benfica en una sufrida final, como suele ocurrir, la cual tuvo que llegar a los penaltis para decidir al vencedor. Antes, 120 minutos de fútbol y de nervios que dejaron no muchas ocasiones, repercutiendo en el 0-0 final. En la tanda de penaltis Beto se erigió en héroe al detener dos penaltis al cuadro portugués. En los sevillistas anotaron Bacca, MBia, Coke, y, el definitivo, Gameiro.

Éxtasis final y el trofeo que volaba hacia Sevilla. Al día siguiente celebración por todo lo alto en la capital de Andalucía, para cerrar la temporada ante el Elche el domingo de esa semana, con victoria por 3-1. No obstante, ese fue el cierre a los choques en competición oficial, pero todavía quedaba hacer un tour por Asia, concretamente en Indonesia y Malasia ante el Pelita Bandung y el Selangor respectivamente. Con esto se puso el punto y final a la temporada 2013/2014.

Verano, mercado y fichajes

Como cada periodo estival, la secretaría técnica del Sevilla tuvo que trabajar duro para rearmar un equipo que perdió a tres piezas fundamentales: Rakitic (Barcelona), Alberto Moreno (Liverpool) y Fazio (Tottenham). Además salieron Julián (Almería), Botía (Olympiakos), Guarente (Empoli), Hervás (Sabadell), Perotti (Genoa), Cheryshev (Real Madrid) y Marko Marin (Chelsea). Y también fue baja MBia en su momento, aunque después volvió.

Con esto, Monchi tuvo que volver a quebrarse la cabeza para reestructurar el equipo. Así, llegaron Barbosa (Las Palmas), Arribas (Osasuna), Kolodziejczak (Niza), Tremoulinas (Dínamo de Moscú), Krychowiak (Stade de Reims), Aleix Vidal (Almería), Banega (Valencia), Deulofeu (Barcelona), Denis Suárez (Barcelona) y Aspas (Liverpool).

Pretemporada y Supercopa

La temporada del Sevilla tenía una fecha marcada para estar a tope, el 12 de agosto, día de la Supercopa de Europa. Un mes antes volvieron los futbolistas de las vacaciones, dando paso a los primeros amistosos. Después llegó una gira por Francia, Alemania y Holanda, siendo el paso previo al encuentro ante el Real Madrid, y que al final se acabarían llevando los blancos por 2-0, ambos goles de Cristiano Ronaldo.

No se pudo conseguir la Supercopa, pero eso no alteró los planes sevillistas, ya centrados en la liga. Y todavía quedaba algún compromiso antes del campeonato doméstico, como el Carranza, justo antes del inicio liguero, cuya primera jornada fue ante el Valencia en el Pizjuán, con resultado de empate a uno.

Arranque prometedor

Los de Unai Emery engancharon cinco partidos sin perder, con cuatro triunfos y un empate. No obstante, esa racha fue frenada de golpe en el Calderón, donde el Atlético de Madrid barrió a los sevillistas, que dieron una imagen bastante pobre. 4-0 para despertar a un Sevilla que, pese a la derrota, seguía teniendo un buen inicio. Además, los partidos que ganó en este primer tramo fueron con solvencia, algo que faltaba, sobre todo, en temporadas anteriores. Son las victorias ante Espanyol y Córdoba, ambas fuera, y ya sin la maldición de encuentros sin vencer lejos de Nervión, estadística hecha pedazos hace poco más de un año.

Jornada 1 Sevilla 1-1 Valencia
Jornada 2 Espanyol 1-2 Sevilla
Jornada 3 Sevilla 2-0 Getafe
Jornada 4 Córdoba 1-3 Sevilla
Jornada 5 Sevilla 1-0 Real Sociedad
Jornada 6 At. Madrid 4-0 Sevilla

Una racha truncada

Tres victorias más ante Deportivo (4-1), Elche (0-2) y Villarreal (2-1) ponían al Sevilla en la mira de España, ya que podía ser líder de la categoría si lograba vencer en San Mamés, algo que no ocurrió. Los de Emery cayeron por 1-0 ante el Athletic, un choque que supuso el inicio de un noviembre negro. A la derrota en Bilbao le siguió un empate ante el Levante (1-1) como local y una ‘manita’ del Barcelona en el Camp Nou (5-1).

Jornada 7 Sevilla 4-1 Deportivo
Jornada 8 Elche 0-2 Sevilla
Jornada 9 Sevilla 2-1 Villarreal
Jornada 10 Athletic 1-0 Sevilla
Jornada 11 Sevilla 1-1 Levante
Jornada 12 Barcelona 5-1 Sevilla

Un punto de siete posibles hacían que el colchón logrado hasta ese encuentro en Bilbao se diluyera, bajando de la nube a un Sevilla que, a pesar de ello, seguía con buenos números, aunque sin llegar al registro de brillante. El último día de noviembre el Sevilla venció al Granada por 5-1, cerrando esa mala racha de resultados.

El mes de diciembre trajo la consolidación de esa recuperación, con la victoria en Vallecas ante el Rayo (0-1) y el empate ante el Eibar (0-0), quizás, junto con el Levante, los únicos ‘peros’ que se le ponen a los blanquirojos en la presente campaña. Por último, los sevillistas no jugaron la última fecha del año contra el Real Madrid, ya que éstos disputaron el Mundial de Clubes ese fin de semana. Ese encuentro se disputará en febrero.

Jornada 13 Sevilla 5-1 Granada
Jornada 14 Rayo 0-1 Sevilla
Jornada 15 Sevilla 0-0 Eibar

Eficaz en Copa, aprobado en Euroa League

La tarea pendiente, o reprochable, a Emery en los casi dos años que lleva en Sevilla era la eliminación del pasado curso ante el Racing de Santander en Copa del Rey. Este año, con el Sabadell como rival, no quería pasar por mismo, y dejó sentenciada la eliminatoria en el partido de ida, con un rotundo 1-6, ratificado en el choque de vuelta con otra goleada, esta vez por 5-1. En octavos espera el Granada de Joaquín Caparrós.

Solo pudo ser segundo de su grupo en la Europa League, por detrás del Feyenoord holandésEn Europa League las cosas han ido bien, pero no tanto como se esperaba en un principio. En un grupo complicado, solo fue capaz de ser segundo, viéndose superado por el Feyenoord. Además, tuvo que esperar hasta el último partido ante el Rijeka para asegurar la clasificación, algo que solventó sin problemas ante los croatas.

El grupo se le complicó en el mencionado mes de noviembre, negro para los intereses hispalenses, cuando cayeron en ‘De Kuip’ ante el Feyenoord. Entonces dejaron de depender de ellos mismos para ser primeros, cosa que finalmente no sucedió. Ya clasificados como segundo, el rival será el Borussia Mönchengladbach, con ida en Sevilla el 9 de febrero y vuelta en Alemania una semana después.

Partidos Europa League
J1: Sevilla 2-0 Feyenoord J4: Sevilla 3-1 Standard de Lieja
J2: Rijeka 2-2 Sevilla J5: Feyenoord 2-0 Sevilla
J3: Standard de Lieja 0-0 Sevilla J6: Sevilla 1-0 Rijeka

Números

Puntos 2014: 67

  • Partidos: 53
  • Liga: 36 (20 victorias, siete empates y nueve derrotas)
  • Copa del Rey: 2 (dos victorias)

UEFA Europa League: 15 (siete victorias, cuatro empates y cuatro derrotas)

Máximo goleador: Carlos Bacca (16)

Posición actual club en el Mundo (IFFHS): 19 (206,00)

Protagonistas

Rakitic: El croata dejó en Nervión un sabor agridulce este verano cuando se marchó, ya que soltó las riendas de un equipo al que comandó desde principios de temporada. Tras la salida de Navas, Negredo y Palop, el mediocentro asumió la capitanía, y explotó como jugador y goleador, llamando la atención de todo un Barcelona.

En esa tesitura se vio el jugador en verano, la de continuar en el club o probar fortuna en otro lugar. Optó por la segunda opción, y su destino fue el club azulgrana, no muy lejos. Eso le permite volver de vez en cuando a Sevilla, de donde es su mujer. Entre lágrimas se despidió tras volver del Mundial, pero cada vez que vuelve, ya sea a la ciudad o al Pizjuán, lo hace con una sonrisa.

MBia: El hombre gol de este Sevilla, el que puso el alma para meter a los blanquirojos en la final de Turín, anotando incluso un penalti en esa cita. El camerunés hizo cinco tantos en el pasado curso, algo que ya ha superado esta campaña, además con goles clave, como el de Rijeka, también en el último suspiro.

La historia con MBia es de amor total, ya que el africano, que tiene una buena relación con Monchi, llegó a venir a Sevilla a pedir opinión de dónde jugar este año. Finalmente, el de Camerún decidió repetir en Nervión, algo tomado como un regalo por el club.

Unai Emery: El profesor, el catedrático, el que no descansa ni en su casa, siempre buscando una estrategia. Los números le han respaldado tanto como para ganarse una renovación, realizada en junio, y dando calabazas al Milán.

Siempre que puede lo dice, está prendado de Sevilla, y reclama protagonismo para su equipo, no para estar peleando con los grandes por ganar la liga ni mucho menos, pero tampoco sin andar muy lejos de esos primeros puestos.