Finales de enero y llega la primera final. Y además, una final que comienza perdiendo, pues la desventaja que trae de Barcelona pone piedras en el camino hacia la final copera. Aún así, la final se juega en Nervión y eso acerca mucho el objetivo: estar en semifinales.

Para ello, debe volver a ser una noche mágica en el Sánchez-Pizjuán. Como la del Oporto, el Lille o el Panathinaikos. Es decir, remontada. Darle la vuelta al lamentable partido que hizo el Sevilla en Cornellà-El Prat (3-1). Quizá ese gol es el que da más esperanzas a los blanquirrojos. Ese tanto de Bacca hace que las semifinales estén a dos goles.

Este partido ya lo ha jugado

Las sensaciones de partido grande no son nuevas. La pasada campaña esta plantilla ya supo lo que es tener que remontar en su estadio un mal partido de ida. Así es como ganó, en gran parte, la Europa League que brilla actualmente en la vitrina nervionense. Pero eso no asegura nada.

El de esta noche es un partido complicado, donde un fallo defensivo puede echar por tierra todo el trabajo ofensivo. Aunque haya que marcar dos goles como mínimo, sellar la portería debe ser igual de importante. Una portería que puede tener cambio de protagonista, ya que probablemente Unai Emery alinee a Beto en detrimento de Sergio Rico.

El resto del once es previsible. Todo lo mejor que tenga el técnico vasco disponible, donde al final no está el polaco Krychowiak.

Su oportunidad

El Espanyol es actualmente noveno en la clasificación liguera. O sea, no parece que vaya sufrir ni a pelear por los puestos europeos. Por ello, hoy se la juega. Si pasara, tendría muy cerca una final. Y para los tiempos de duopolio de finales coperas que corren, es mucho.

También vienen con todo y todos. Sergio González aparca momentáneamente la competición doméstica para intentar parar la más que probable avalancha sevillista que se les avecina. Y marcar.

Un gol espanyolista puede ser clave en el devenir del partido, puesto que obligaría a los blanquirrojos a anotar tres goles para empatar y cuatro para clasificarse. Por eso, además de mirar el aspecto defensivo, saldrá con dos puntas. Con dos estiletes llamados Sergio García y Felipe Caicedo, este último en racha y que abrió la eliminatoria con su golazo en el Power8.

En la ida, los espanyolistas se dieron un festín. Foto: LFP.es

A por la séptima

Si el Sevilla pasa, jugará su séptima semifinal copera de lo que va de siglo XXI. Serían 7 de 15. Un bagaje espectacular que hace de la Copa del Rey una competición fetiche para los sevillistas, que la han ganado dos veces en la última década.

La tercera puede llegar si hoy muestra su mejor cara ante un rival que estará 'sólo', ya que la afición periquita no estára presente en el partido en un número considerable.

¿Casualidades?

Que hayan designado a un árbitro valenciano para arbitrar un partido entre el mayor rival del Valencia y el equipo que acaba de eliminarlo es, por lo menos, curioso. Es una casualidad (o no) interesante que esperemos que no influya en las suspicacias tras el partido.

Su nombre es Juan Martínez Munuera y es funcionario. Ojalá funcione su justicia y este apartado sea una anécdota cuando la eliminatoria llegue a su fin. Cabe reseñar la juventud de este colegiado (32 años), lo cual no le ha impedido ser ya internacional, condición que tiene desde este 2015.

Los protagonistas

Posibles alineaciones

Convocatorias

Sevilla: Beto, Sergio Rico, Coke, Diogo, Fernando Navarro, Aleix Vidal, Carriço, Nico Pareja, Arribas, Kolo, Iborra, Banega, Vitolo, Denis, Deulofeu, Iago Aspas, Bacca y Gameiro.

Espanyol: Kiko Casilla, Duarte, Hector Moreno, Javi López, Lucas Vázquez, Fuentes, Colotto, Caicedo, Álvaro, Arbilla, Montañés, Pau López, Mattioni, Víctor Sánchez, Víctor Álvarez, Salva Sevilla, Stuani, Sergio García, Abraham y Cañas.