Más que importante la victoria de hoy del Sevilla FC en el Madrigal. Tres puntos que saben a gloria, ya que se han conseguido ante un rival deseoso de revancha tras la eliminación europea del Villarreal CF a manos precisamente del conjunto hispalense. Hoy ambos equipos llegaban en igualdad de fuerzas a un Madrigal que sufrió las consecuencias de una lluvia que no benefició, precisamente, al equipo.

El análisis táctico, aunque mirando el resultado parezca ilógico, no fue el mejor planteamiento del entrenador sevillista, es más, no fue del todo merecida la victoria sevillista, ya que el handicap se cebó con un Villarreal que veía en la línea de gol de Sergio Rico un muro, literalmente, infranqueable, ya que el portero sevillano salió imbatido del estadio del submarino amarillo. 

Emery no acertó

El planteamiento fue bastante defensivo, con lagunas importantes en defensa, hecho del que es imposible juzgar a Emery, pero sí se vio una bajada importante en la intensidad de juego con respecto, sin irse más lejos, al partido de vuelta de octavos de final de UEL ante el Villarreal. La presión de la delantera sevillista fue nula y las líneas de la defensa y el mediocampo estaban bastante separadas, lo que le dio libertad para maniobrar en el mediocampo a un Trigueros que dio imaginación para crear jugadas a un Villarreal que si no se topaba con la defensa sevillista lo hacía con el portero rojiblanco, y si no, lo hacían con los palos de la portería del mismo.

Cambio de dinámica en la segunda mitad

Por tanto, ambos equipos llegaron al descanso sin haber marcado ningún gol, aunque también los visitantes pudieron convertir alguna ocasión a la contra. La segunda mitad tuvo una tónica bastante distinta, como refleja el resultado. Fue la táctica de Emery la que cambió, no siendo así en la del entrenador rival, Marcelino García Toral. Unai planteó para los 45 minutos restantes un juego más ofensivo, con claras referencias en el mediocampo y con transiciones largas y balones aéreos que permitieron al Sevilla FC llegar al área rival con más facilidad.

Con esta estrategia llegaron los dos goles sevillistas por parte de un magnífico Coke durante el partido ocupando la banda derecha con Diogo; y por parte de un Vitolo que no para de sumar y seguir, aún habiendo visto su gran juego recompensado ya con la internacionalidad con la absoluta.

Como resumen, se puede destacar que el planteamiento de Unai Emery para la primera parte no fue el acertado, o sí lo fue y los jugadores no lo plasmaron en el terreno de juego, aunque dicho planteamiento fue evolucionando hasta conformar una fuerte línea defensiva y un mediocampo sólido que ayudó a marcar los goles del partido al contragolpe.