"Una victoria nazarí esta noche, daría la cuarta plaza al Sevilla"

Ya son 66, los puntos que acumula el Sevilla en su haber y un centenar de goles, con los dos anotados ante el Rayo los que suma el equipo entre todas las competiciones, asegurando con esta cifra, su clasificación matemática para la próxima campaña en Europa a través de la Liga, al menos en su competición fetiche, la Europa League. Pero este Sevilla quiere más, no se conforma con una buena campaña en Liga y la posibilidad de acceder a Champions a través de la Europa League ( sería ganándola y ya están en semifinales), sino que quieren acceder vía Liga BBVA y no cederán en su empeño. De momento, le han pasado la presión al equipo Ché, que de perder hoy en Mestalla, ante un Granada que se juega la vida, se verían superados y sin su plaza Champions, que durante tantas jornadas han defendido.

Rayo Vallecano, un rival sin complejos

El partido de ayer, era un encuentro trampa, en el que el Sevilla tenía mucho que perder y poco que ganar, puesto que el rival, el siempre atrevido Rayo Vallecano de Paco Jémez, se encuentra virtualmente salvado y venía a Sevilla sin temor a nada ni a nadie, a disputarle de tú a tú los tres puntos hombres de Unai. Pero ni con esas, el Sevilla está lanzado, y eso, sus rivales lo notan, sobre todo en casa. Y pese a venir de una “mini” mala racha de dos partidos sin ganar ( Barcelona en casa y Granada en los Cármenes), el equipo supo solventar el encuentro en la primera parte, aunque con algún que otro susto, del valiente y aguerrido equipo de Vallecas.

Pronto empezaron a mandar los locales, que supieron aprovechar el desconcierto provocado por la lesión de uno de los hombres fuertes de la zaga vallecana, Antonio Amaya y al cuarto de hora, volvía a brillar el Iborra que hizo dudar al seleccionador nacional para poner el primer tanto en el luminoso. El Sevilla, viendo el calendario que se avecina, insistía en resolver el partido antes del descanso y disminuir el ritmo del partido, ante un Rayo Vallecano que no le perdía la cara al partido pero que veía como justo antes del descanso, Carriço ponía tierra de por medio anotando el segundo.

El Rayo, sin nada que perder, y con su salvación prácticamente asegurada, salió sin miedos en la segunda parte y de no ser por la falta de puntería de sus arietes ( 22 tiros, 3 a puerta) y las intervenciones de Sergio Rico, seguramente estaríamos hablando de otro resultado, posiblemente más ajustado. Aunque también cabe destacar que el desacierto estuvo en ambos bandos. El Sevilla, en sus contras, condujo mucho peligro y también pudo aumentar la cuenta a través de Denis, Reyes y Deulofeu ( que volvía a jugar desde el 22 de febrero).

Jornada intersemanal

Tanto Jémez como Emery, son conscientes de la carga que puede suponer disputar tres encuentros de liga en siete días (jornadas 33, 34 y 35) y más, a estas alturas de la temporada, por lo que optaron por dar descanso a algunos de sus jugadores. En el caso de los visitantes, la ausencia más destacada fue la de Alberto Bueno, su jugador franquicia, al que al parecer Paco decidió reservar para el partido entre semana ante el Valencia en casa. Mientras que Unai, tuvo que alinear de nuevo al canterano Sergio Rico debido a unas molestias de Beto en el hombro y a kolo en el centro de la zaga, que puede ser uno de los hombres clave en este tramo final de temporada, ya que parece ser hombre elegido por el técnico vasco para suplir al argentino, Nico Pareja.

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