Como suele suceder a principio de temporada, todo es ilusión aunque unida a mucho trabajo y preparación física: "Son nuevos retos, la ilusión de volver a conjuntar un gran equipo, que sea como el que se ha visto en los últimos años, que nos dé razones para creer en él y para afrontar una competición tan bonita como es la Champions. Es la máxima competición a nivel de clubes y estamos en ella, vamos a prepararnos, vamos a ilusionarnos y vamos a mantener lo que hemos hecho bien en los últimos tiempos y a partir de ahí a disfrutar".

Después de unas vacaciones más que merecidas, toca volver a ponerse el "mono" de trabajo para estar en forma y acabar como mínimo, con el físico de la temporada pasada: "Sabemos que se sufre, pero merece la pena. Creo que en los últimos años hemos llegado muy bien al final y eso se debe a que hemos hechos pretemporadas muy buenas. Es importante, hay que hacerlo".

El grupo lo ve bien, con alegría y dinamismo entre los compañeros, tanto entre los nuevos como entre los que ya lleva compartiendo vestuario varios años: "Lo he visto bien, con alegría, la gente nueva adaptándose, conociéndonos, ayudándoles por nuestra parte y esperando a que lleguen los compañeros que aún quedan y que se acabe de formar el equipo. Pero sobre todo con un gran ambiente y con esa ilusión de poder empezar y poder formar un gran grupo".

Por último, fue cuestionado sobre la competitividad que transmite el entrenador a la plantilla y la necesidad de tenerla, debido a la exigencia del año que se aproxima: "Lo que nos ha caracterizado últimamente es que hemos sido una plantilla amplia, competitiva, y lo principal es que eso beneficie al grupo. Estoy seguro que este año va a ser igual, que el nivel del equipo va a ser alto porque la competencia es máxima".

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