El joven cancerbero, ha sido protagonista de una de las experiencias más desagradables que se han vivido en el combinado nacional hasta el momento. Y es que el pasado lunes de madrugada, como atestigua a los compañeros de El Desmarque, los jugadores y el cuerpo técnico eran informados de que el amistoso frente a Bélgica no se iba a disputar debido al alto riesgo de ser objetivo de nuevos atentados terroristas.

Pese a la suspensión del partido, el canterano hispalense asegura que en todo momento la situación estaba controlada y que no sintieron miedo, más allá de la prudencia y respeto que la situación requería. Aunque esta tranquilidad, no resta que al jugador esta situación le haya resultado dura y desagradable, ya que es algo a lo que nadie está preparado: “La situación ha sido un poco fea. Nadie quiere que ocurran sucesos como estos”.

A continuación, Sergio relata como se les comunicó la decisión de no jugar el partido: “Estando allí en Bruselas recibimos cerca de la una de la madrugada un mensaje del coordinador de la selección diciendo que se suspendía el partido. Con lo cual volvíamos a Madrid lo antes posible siempre que fuera seguro”.

Rico reitera la seguridad y la tranquilidad con la que se ha llevado la situación: “Tanto los jugadores como el cuerpo técnico estábamos tranquilos, puesto que la seguridad que había en todo momento fue exquisita. No nos hemos sentido desprotegidos ni mucho menos. Estábamos tranquilos aunque sí leyendo noticias por redes sociales, prensa y demás, pero en esa situación estábamos protegidos”.

La situación en Europa es crítica, pues la mayoría de los países están y siguen, en alerta bajo amenaza terrorista debido al atentado del viernes en Paris y los acontecimientos sucedidos esta semana. De esta situación la expedición fue consciente nada más salir del hotel de concentración: “No salimos del hotel, exclusivamente para entrenar el día antes del partido. Había mucha policía y seguridad por todos lados, en todos los trayectos que hacíamos íbamos escoltados”.

Por último, destaca la labor de los más veteranos como Piqué, Casillas, Cazorla,... que en todo momento se encargaron de mantener el orden y la tranquilidad entre los compañeros: “Como en cualquier equipo, los más veteranos y los capitanes se encargaban un poco de mantener el orden”. Asegura Sergio, que desgraciadamente vuelve a Sevilla sin sumar los que se presumían iban a ser sus primeros minutos y con una de las experiencias más desagradables en su prometedora trayectoria.