Último partido de 2015 para un Sevilla que no sufrió demasiado ante un Espanyol que tiene aún el rumbo perdido de la competición. Una cómoda victoria por 2-0 cimentada en una intensa presión desde el primer minuto y en un juego rápido llevado a cabo por un eléctrico Konoplyanka y un arquitecto del balompié como Banega. Apenas 40 minutos le hicieron falta a los andaluces para cerrar el año de la mejor manera posible.

Con el regreso de vacaciones, Unai Emery tenía ante sí la posibilidad de alinear a casi cualquier futbolista de la plantilla, exceptuando los lesionados y el sancionado Krychowiak. El vasco tenía a sus hombres frescos gracias a los días que habían tenido libres. Pero como es habitual en el técnico, sorprendió a todos con la alineación presentada ante los pericos. La inclusión de jugadores como Cristóforo que viene de una importante lesión y de Immobile que llevaba sin ser titular más de un mes fue devuelta por el charrúa e italiano en forma de buen fútbol y goles.

Cristóforo, no quiere salir          

El uruguayo ha vivido en Sevilla un calvario con las lesiones pero es de esos futbolistas que caen de pie en la ciudad hispalense y encandiló al público desde los primeros días que ejercía como uno de los ‘guardianes de Nervión’. Ante el Espanyol, con la camiseta de titular, contuvo a la perfección la salida de balón rival y fue el ayudante perfecto para un Banega que en ocasiones se ve superado en número de rivales que lo presionan. Mientras tanto Iborra le guardaba la ropa a Seba para que este se sumara al ataque y buscara un gol que habría sido la guinda a un pastel muy dulce.

Immobile, olfato de gol

El italiano ha sonado en estas navidades para salir rumbo a diversos clubes de su país. Ciro no empezó con buen pie en Sevilla pero parece que Unai Emery está consiguiendo que el jugador se sienta una pieza importante de este bloque que afronta el 2016 vivo en tres competiciones y con aspiraciones de llegar lo más lejos posible en todas ellas. Frente al Espanyol de Galca, Immobile estuvo muy activo desde el primer minuto y su insistencia y ganas quedó patente en el primer gol cuando Vitolo le buscó y ante la oposición de dos defensores visitantes, los superó para poner el 1-0 en el marcador. Del delantero pasivo a un ariete con la pierna cargada para perforar las metas rivales.

Unai Emery se planta en el 2016 con jugadores que llaman a la puerta de la titularidad y que lucharan en cada entrenamiento por ser uno de los once elegidos. A Cristóforo e Immobile hay que añadirle un Escudero que irrumpió con fuerza en el esquema de Emery frente al Valencia y que puede ser una alternativa a una defensa que va recuperando efectivos poco a poco. El 2016 traerá cambios en el once titular del Sevilla, por los menos habituales no será desde luego.