Grzegorz Krychowiak ha analizado junto a su entrenador Unai Emery la eliminatoria de cuartos de final de la Europa League frente al Athletic Club de Bilbao. La ida de mañana a las 21:05 en San Mamés se prevé como una de las citas más importantes de la temporada, más aún con la pésima cara que muestra el Sevilla FC lejos de su estadio.

Sin favoritismos

El pivote sevillista se ha mostrado humilde pese a ser el vigente campeón de la competición y ha asegurado que la eliminatoria está muy abierta para ambos conjuntos: "El haber ganado las dos últimas UEFAS no significa nada, la eliminatoria está al 50%".

En cuanto al rival, ha afirmado tenerlo estudiado y cree que "El partido se va a decidir en detalles. Vamos a hacer lo posible por marcar y no encajar gol. Conocemos al rival".

A romper una mala racha y alargar una buena

Conocedor de la mala racha que arrastra su equipo desde que empezó la temporada, que no ha ganado a domicilio en Liga ni en Europa (Champions League o Europa League, con 4 derrotas y 1 empate), es consciente de que "Es difícil decir porque trabajamos igual para jugar fuera y no conseguimos ganar". El polaco se une a la larga lista de futbolistas nervionenses que aseguran no saber el por qué del mal momento, y afirman que preparan de la misma manera los compromisos en casa que los de fuera.

También sabe de la vitalidad de la cita, por lo que "El partido es muy importante para el club. Nosotros no pensamos en la final, tenemos hambre de título". El Sevilla tiene un idilio especial con esta Copa, que ya ha levantado 4 veces, la última en el país de origen de Krychowiak. La plantilla, desde la humidad, anhela la posibilidad de repetir trofeo por tercer año consecutivo. A Basilea se va por Bilbao.