Un nuevo castigo recibieron en la tarde del domingo los aficionados del Sevilla. Unai Emery saltó a Cornellá-El Prat con un once plagado de inusuales, jugadores de la cantera –Matos, Cotán, Muñoz, Curro-, jugadores que no habían tenido demasiados minutos –Fazio, Diogo, Llorente- y algún que otro reencuentro, en este caso el de Nicolás Pareja con el fútbol.

El partido en sí, fue espeso, el Espanyol –muy necesitado- no tuvo una clara idea de juego hasta que Asensio apareció, para desequilibrar la balanza del partido; por otro lado, los nervionenses, como ya acostumbran en los partidos fuera de casa, fueron un desastre. sin una idea clara de juego, apenas llegaron a portería, donde Llorente e Iborra eran unos completos desconocidos.

Preocupante faceta en ataque

Una de lecturas del partido, que es prácticamente imposible evitar, es la inofensiva delantera que posee el Sevilla FC cuando Kevin Gameiro no se encuentra en el tapete verde. A Llorente, con un rendimiento nulo, no se le espera para el tramo final de la temporada. Y Juan Muñoz, que no aprovecha los pocos minutos que le dan, es un extraño cuando se encuentra en el campo.

El caso de Juan Muñoz puede ser más comprensible, canterano, que juega su primera temporada en Primera División y además juega poco. Pero la temporada de Llorente es realmente preocupante, el nivel del delantero es muy bajo, y su aportación escasa. El riojano apenas a podido sustentar el papel de delantero suplente.

Mala planificación, demasiadas competiciones

Cuando Monchi acierta, se le alaba; pero cuando se equivoca, se le debe criticar. La planificación deportiva del Sevilla tiene un aprobado raspón. Los fichajes no han rendido al nivel esperado y han sido los jugadores más veteranos, los que han tenido que tirar del carro en los momentos más difíciles, jugadores como Kevin, Coke, Iborra, Vitolo…

Aparte del esperpento que ha supuesto la temporada de Llorente, jugadores como Immobile o Kakuta, son prácticamente incalificables, Konoplyanka no ha dado el nivel esperado, solo brochazos de su calidad; Mariano no ha dadel nivel de un campeón de UEL; y Diogo y Fazio no han entrado en el equipo como para tener alguna aportación relevante.

Esta planificación deportiva errónea, en la que solo se salvan jugadores como Rami, Nzonzi o Krohn-Dehli, se ve reflejada a la perfección en la desastrosa campaña a domicilio que ha realizado el equipo. Y sobre todo en el final de campaña tan decepcionante del club. La derrota de ayer frente al Espanyol, fue simplemente un ápice más de larga lista de fracasos en Liga.

Preferencias

Claro está que la derrota frente al Espanyol, es un mero resultado de la acumulación de partidos, unos más importantes que otros, y ese problema es el que ha detonado esa mala racha en Liga, acumulación de partidos, sumado a un corto fondo de armario y poca respuesta de los suplentes. Pues, aunque Unai lo niegue, desde que se eliminó al Molde FK, la competición de la regularidad pasó a un segundo plano, hasta incluso estorbar. Este domingo 1 de mayo, se vio que el campeonato liguero al Sevilla FC le pesa, y que sus mentes: la de su afición, dirigentes, entrenador y jugadores. Antes de comenzar en Cornellá, ya estaban puestas en el Sánchez-Pizjuán, listas para disputar el partido contra el Shakhtar Donetsk.

Si algo hay que destacar de el encuentro disputado en Barcelona, es sin ninguna duda, la vuelta de Nico Pareja a un campo de fútbol, que aunque no se le espere para esta temporada, seguro será determinante para la próxima.