Unai Emery volvió a dejar sus mejores hombres en el banquillo, consciente de que las escasas fuerzas que quedan hay que gastarla en la Copa del Rey y Europa League además de volver a darle minutos a Pareja y poner en la portería a Beto.
El Granada sabía lo mucho que se jugaba en el encuentro de hoy ya que la amenaza del descenso la tiene en ciernes el conjunto nazarí y por ello de inicio salió a presionar la salida de balón del conjunto sevillista, aunque estos gozaron de la primera ocasión del partido por mediación del canterano Curro que se está asentando en las últimas jornadas como jugador titular en el once de rotaciones que presenta Unai Emery. Andrés Fernández se vio obligado a realizar un despeje.
El Granada no había venido a hacer turismo y Peñaranda puso la réplica a la oportunidad sevillista, pero Beto que volvía a la portería tras estar toda la temporada desapercibido demostró sus buenas dotes y paro el remate.
Juan Muñoz goza de buenas ocasiones
El partido había comenzado con un alto ritmo y fue Juan Muñoz quien tuvo tres buenas oportunidades casi de modo consecutivo, en 10 minutos, aunque entre Andrés Fernández y Ricardo Costa se encargaron de zanjar el peligro para el Granada. El Sevilla a pesar de las rotaciones propias de un conjunto que tiene dos finales de copa en 15 días había salido a por el encuentro como predijo Unai Emery en la rueda de prensa.
El choque entró en una fase de mayor relajación en cuanto a intensidad y juego, especialmente por parte del Sevilla que había gozado de las mejores ocasiones. El árbitro que había perdonado sendas cartulinas amarillas a Kolo y Rochina, en un minuto mostró dos a Doucoure y Curro por sendas faltas.
Cuenca abre el marcador
Cuando parecía que la primera parte iba a terminar con empate a 0, el Granada trianguló muy bien en una contra e Isaac Cuenca la culminó con un buen remate y puso en ventaja a su equipo con un gol de los considerados psicológicos.
La segunda parte comenzó con un fuerte aguacero cayendo sobre Sevilla y con un Granada que quiso hacer el segundo gol nada más empezar, pero Pareja se anticipó a Peñaranda y evitó un mayor peligro a Beto.
En esos minutos iniciales de la segunda parte se vio a un Sevilla descompuesto tácticamente donde cada jugador buscaba su oportunidad y fue el ucraniano Konoplyanka el que tuvo la primera de la segunda parte, pero Andrés Fernández envió a córner para evitar mayores sustos. El Sevilla quiso meter una marcha más y Diogo generó una nueva ocasión por banda derecha que el portero nazarí la mandó a saque de esquina.
El Sevilla busca la igualada
El Sevilla se había hecho ya dueño del balón en la segunda parte ya que el Granada estaba esperando atrás siendo consciente que el resultado era de oro, pero Konoplyanka estaba decidido a tratar de igualar el encuentro y tuvo otra ocasión que rechazó un defensa del Granada. Si en la primera parte era Juan Muñoz el estilete ofensivo del Sevilla, ahora era el ucraniano. Quien estaba desaparecido y así lo vio Unai Emery era Fernando Llorente al que cambió por Carlos Fernández y al que el estadio del Sevilla despidió con una sonora pitada.
Los minutos seguían avanzando y todo acontecía igual hasta que Unai Emery vuelve a cambiar y entra Diego González por Juan Muñoz anotando su primer gol en Primera División nada más pisar el césped del estadio Ramón Sánchez Pizjuán. Magnífico debut del canterano.
Con el empate a 1 que perjudicaba notablemente al Granada, Cuenca dispone de dos ocasiones consecutivas para adelantar a los visitantes pero no tiene suerte. José González, entrenador del Granada, hace un doble cambio para refrescar a su equipo y nada más producirse este hecho el Granada por mediación de Babin se vuelve a adelantar en el marcador electrónico.
El Granada sentencia el choque
En los últimos minutos fue Iborra el que buscó la igualada, pero el Granada era quien ponía más ventaja en el choque por mediación de El Arabi de penalti y Cuenca que lograba un doblete.
Con este resultado, el Sevilla lo fía todo a ganar una de las dos competiciones que le quedan para no jugar rondas previas, aunque si gana la Europa League se clasificará directamente para la Fase de Grupos de la Champions League. El Granada en cambio logra aire de cara a una jornada de infarto contra un Barcelona que se juega la liga.