Después de un par de temporadas en la Liga Adelante, el Real Sporting de Gijón volvió a Primera División por todo lo alto, recibiendo al Real Madrid, consiguiendo arañar un empate tras terminar a cero goles el encuentro. El lateral mostoleño se encargó de defender a todo un ganador de tres balones de oro, como Cristiano Ronaldo, algo sin duda complicado, pero que le hizo terminar muy contento a Alberto Lora, aunque también muy cansado, del enorme esfuerzo realizado en los noventa minutos del partido.

"Mi padre me ha dado la enhorabuena para mí y para todos mis compañeros. Isco me parece un jugador sorprendente"

Algo que resaltó Lora fue la tranquilidad de todos los compañeros debutantes en Primera División, asumiendo todo lo que tuvieron que correr para detener a los jugadores del Real Madrid. "Hemos acabado un poco cansados, porque la verdad es que correr detrás de estos dos bichos es complicado. El trabajo de todos los compañeros ha sido increíble, las ayudas más que nunca hay que hacerlas en estos partidos, más esfuerzo de lo normal porque son muy buenos y son difíciles de parar. Al principio vi las caras de mis compañeros en el autobús, que nos han hecho un recibimiento espectacular los aficionados, luego al calentar con tres cuartos de la grada llena, y saltar al campo y verlo lleno, podía parecer que alguno estaba nervioso, pero todos estaban muy tranquilos", comentó en El Larguero de la Cadena Ser.

Para terminar, Alberto Lora tiene claro que no es flor de un día el Real Sporting de Gijón, al igual que su debilidad por Isco Alarcón, quien le recuerda mucho a Zinedine Zidane. "El aficionado que siga un poco la Segunda División, habrá visto que este Sporting no es flor de un día, nos resumimos en trabajo, intensidad, solidaridad y no parar de hacer esfuerzos. Mi padre me ha dado la enhorabuena para mí y para todos mis compañeros. Isco me parece un jugador sorprendente, quizás no ha estado tan lúcido como en otras ocasiones, pero sólo el simple control me recuerda mucho a Zidane, es una debilidad mía, tendré 80 y tantas camisetas en casa, yo le di la mía y él me dio la suya", concluyó.