Marcelino García Toral servirá de anfitrión a la plantilla y aficionados rojiblancos que se desplacen a Villarreal. Se enfrenta al equipo de su ciudad, donde se formó y al cual, según dice, le guarda un enorme respeto y cariño. El entrenador que ahora viste de color amarillo señala que le gusta ver a su “otro” equipo en Primera, pero que lo que se le hace difícil es enfrentarse a él.

El Sporting no llega en su mejor momento, enlazada una racha bastante mala que le ha llevado a ocupar una plaza de descenso por primera vez en la temporada. Pero este aspecto no debería preocupar a los de Abelardo ya que el Villarreal suele tener grandes problemas para hacer frente a equipos situados de media tabla para abajo. De todas formas, el submarino amarillo no quiere desperdiciar esta oportunidad de sumar puntos porque, como al Sporting, el calendario se le complica.

Un equipo de toque

Si por algo ha destacado el Villarreal en las últimas jornadas es por dominar siempre los partidos. Marcelino ha insistido en la importancia del toque de balón y de la posesión. Nombres como Bruno Soriano, Bakambú, Roberto Soldado o Denis Suárez provocan la indecisión en cualquier defensa.

Se ha confirmado que tanto Manu Trigueros como Roberto Soldado han superado los problemas que tenían; por lo tanto, podrán formar parte del once ante el Sporting. Un once en el que casi seguro no formará Dos Santos.

En vista del juego de uno y otro equipo se puede esperar un partido intenso con mucho ritmo, en el que seguramente tome las riendas del partido el Villarreal y el Sporting se decida a hacerse fuerte en las contras. Si bien es cierto que el conjunto amarillo pasó la pasada temporada por varias fases irregulares parece que en está se busca mayor regularidad. Un momento y una base en la que parece encontrarse ahora mismo el equipo de Marcelino después de vencer a otros conjuntos como Deportivo, Valencia, Real Sociedad o el Real Madrid.