La ida de la semifinal de Copa Federación disputada en Linarejos, no traería goles, pero si un gran partido entre dos grandes equipos. Se trataría de un partido histórico, nunca se habían enfrentado el Linares y el Real Unión de Irún.

Cerca de 2.000 espectadores se dieron cita en el vetusto minero para presenciar dicho evento histórico. 45 minutos para cada conjunto, en la primera mitad, los locales superarían a los vascos, y en el segundo tiempo, se vería a un Real Unión superior, con más intensidad en ataque.

Los de Irún contaban con hasta cuatro futbolistas con experiencia en la máxima categoría, eso, sumado a la juventud de los demás futbolistas, haría de un equipo compacto y completo. El Real Unión de Irún es de Segunda División B, una categoría por encima del Linares Deportivo. Además, está luchando por los playoffs de ascenso a la división de plata.

El Linares Deportivo, por su parte, sigue creyendo en esta competición. Tras unos tropiezos en liga regular, que no ha impedido perder el liderato, los azulillos no renuncian a la final. 

Entrando ya en el terreno futbolístico, la primera la tendría el Linares Deportivo, Bauti se enfrenta bien por banda derecha en un uno contra uno, la centra y Javi Quesada recoge el despeje del portero para ocasionar peligro en ataque. Un Linares más dinámico, jugando con la pelota, y manteniendo la posesión en los primeros instantes del encuentro. A pesar de estar mejor plantado en el terreno de juego los locales, no tendrían ocasiones que hicieran peligrar el área de Otermin.

Javi Quesada sería el protagonista de la segunda ocasión local, tras un saque de córner, lanza el esférico a portería, pero Otermin hace una buena parada para defender a los vascos. Los compases de la primera parte irían en la misma dirección, con llegadas no muy continuas pero con mayor movilidad de los azulillos, Lara a punto estaría de abrir el marcador, pero otra vez Otermin, blocaría bien el balón.

Se llegaría al descanso con el empate inicial a cero, una primera mitad, que los locales serían mejores, disfrutando de cuatro ocasiones, mientras que el Real Unión, sólo tendría un medio disparo por parte de Eneko.

Comenzaría la segunda parte con el Real Unión dando un paso hacia adelante, intentando buscar las bandas, tras un primer tiempo desaparecido en el juego, los de Aitor Zulaika despertarían en los primeros minutos de la segunda mitad. Jorge Sánchez tendría que trabajar en su portería para evitar males mayores para la parroquia azulilla. Saizar primero y Mikel Alonso después serían los encargados de hacer peligrar el área del Linares.

Torres haría un doble cambio, entrarían Ángel y Corpas por Juanfran y Garrido, así, el entrenador, quería meter más agresividad en la banda, y un toque de aire fresco en la delantera. 

Los vascos irían de menos a más, con una presión más adelantada, a los locales les costaría más triangular y mover el esférico.

Con Rafa Payán en el verde del terreno de juego, se tendría otra buena ocasión para los mineros, pero de nuevo Otermin evitaría mayor peligro.

En los segundos 45 minutos se vería a un Real Unión más atrevido, buscando el gol. El Linares no renunciaría al ataque, pero tendría una intensidad menor que en la primera parte.

Azkoiti buscando el centro chocaría el esférico en el larguero de la portería defendida por Jorge Sánchez en los minutos finales del partido. Ya en el tiempo añadido, Corpas se retiraría lesionado; un esguince en el tobillo, que lo tendrá de baja dos semanas.

Un empate a cero que deja totalmente abierta la eliminatoria. Todo se decidirá en Irún en el Stadium Gal. Ambos conjuntos necesitarían marcar, aunque al Linares le valdría un empate a goles.

En dos semanas se sabrá quién disputará la gran final de la Copa Federación. El sueño continúa para los linarenses, quedan 90 minutos de ilusión y esperanza.