Dicen que la magia de los playoffs de ascenso es que va mucho más allá de lo que se decide en el verde. Sí, en el fin de semana se decide el futuro de tu equipo, pero los partidos son sólo el final de una semana vertiginosa, en la que cualquier aficionado intenta buscar, con el gusanillo en el estómago, algo de información sobre el rival.

Desde que ayer lunes, poco antes de las seis de la tarde, el caprichoso azar quiso emparejar al San Fernando CD con el Ontinyent, son muchas las noticias que se han recorrido los 719 kilómetros de distancia entre una ciudad y otra para temor del contrincante. En La Isla, un nombre resuena como principal amenaza para retornar a Segunda B. Ese es Christian Perales. Sus veintiséis goles esta temporada le avalan.

Christian, a escasos dos meses de cumplir los veintiséis, sabe lo que es jugar en la categoría de bronce del fútbol español. Lo hizo la pasada temporada, en las filas del Olimpíc de Xátiva, donde tuvo la suerte de medirse a todo un Real Madrid en dieciseisavos de final de Copa del Rey. Sin embargo, una inoportuna lesión una semana después le condenó al ostracismo hasta que el Ontinyent se interesó por sus servicios.

Curiosamente, dos años antes, en 2012, Perales ya se enfrentó al San Fernando en los playoffs de ascenso a Segunda B. En aquella ocasión, el enfrentamiento tuvo lugar en semifinales y el cuadro azulino se impuso al filial por un global de 3-0.

En la conversación telefónica que VAVEL ha mantenido con el ariete, el respeto y la curiosidad se han impuesto a cualquier otro sentimiento. Y es que los días previos a un duelo de semejante calibre transcurren en un ambiente de histeria colectiva por saber algo más sobre el “enemigo”. Esa es la magia del fútbol. Eso es lo bonito de ir a ciegas, con la ilusión por bandera, en unos playoffs.

Pregunta: ¿Qué sensaciones le ha dejado a Christian Perales el sorteo?

Respuesta: El San Fernando es uno de los rivales que no quería. Me medí a ellos con el Levante B y recuerdo el gran equipo que tenían. Además, es lógico que les urja el ascenso, ya que otro año en Tercera siempre es complicado. Tengo compañeros con amigos allí y me comentan que, además de seguir contando con Carlitos y Ñoño, han firmado bien. Será un duelo fantástico.

P: ¿Cómo llega el Ontinyent a esta eliminatoria?

R: El Grupo VI ha sido una auténtica locura este año. Nos hemos clasificado por la imposibilidad del Villarreal C de jugar la liguilla. ¡Y eso que empezó la liga en la zona baja! Al ser un recién descendido, tenemos ganas de volver lo antes posible a Segunda B, al igual que nuestra afición que, a pesar de empezar un pelín más parada que en otras ocasiones, a buen seguro que ahora en la fase de ascenso se volcará con nosotros. No obstante, la lejanía entre ambas ciudades puede hacer que no haya desplazamiento masivo a Bahía Sur.

En lo que respecta al equipo, somos una plantilla corta, pero madura. No me atrevo a decir veterana, porque los jugadores con más edad son Palací e Iñaki, ambos centrocampistas de 29 años. El capitán es el central Escudero (26), que esta temporada ha aportado unos cuantos goles.

P: A título personal…temporadón, ¿no?

R: La clave ha sido no lesionarme y jugarlo todo. En lo que respecta al número de goles me ha llamado poderosamente la atención que, en cuanto salió el sorteo, mi Twitter echó humo por la gente de San Fernando que, viendo mis números, se preocupaban. Yo no los veo para tanto aunque, obviamente, siempre gusta que el rival te respete.

P: ¿Podríamos hablar de que esta eliminatoria es una final anticipada?

R: Sin duda. Creo que ni Ontinyent ni San Fernando han tenido suerte. Si no nos hubiéramos cruzado, creo que estaríamos ambos en Segunda B el año que viene. Pero lo que más rabia me da es que haya sido tan pronto, y más sabiendo que el menor error te deja fuera, que no hay segunda oportunidad. Los compañeros que conocen el Grupo X dicen que históricamente ha sido fuerte y este año ha tenido a equipos como el Algeciras y el propio San Fernando. Esperemos que se vean dos buenos partidos y que gane el mejor.