Dice el refrán que "la paciencia es la madre de la ciencia" aunque que la ciencia no siempre es exacta. Esto parece estar ocurriendo en la UD Almería. Desde el comienzo de liga la palabra "paciencia" se ha convertido en el principal discurso de un entrenador, que parece no enderezar el rumbo de un grupo de jugadores talentosos pero con poco oficio.

Se ha completado la jornada diez de liga y el Almería no ha logrado aún ninguna victoria en la liga BBVA, convirtiéndose así en el colista de la Primera División. El presidente Alfonso siempre ha defendido a su entrenador a pesar de los malos resultados del equipo; sin ir más lejos Francisco fue ratificado en su cargo por su presidente después de la derrota contra el Rayo Vallecano. Pero todo en esta vida, se agota, y la paciencia no es una excepción. La dura derrota que ha encajado el equipo andaluz en Anoeta parece haber sacado la tarjeta roja a Francisco.

Falta de competitividad

En la que puede haber sido su última rueda de prensa como técnico del Almería, Francisco no ha buscado excusas a la derrota: "No hemos competido". Ese puede ser el resumen no solo de este partido, sino de toda la temporada del Almería. El no saber competir ha llevado a este grupo voluntarioso a la última posición de la tabla.

El discurso en rueda de prensa ha sido continuista: "Lógicamente, de verdad que es día difícil, porque el equipo ha estado mal, no ha competido, estamos preocupados”. A pesar de la tristeza parece que el míster se encuentra con fuerzas para dar la vuelta a situación: "Hay que seguir y pelear hasta el final para salir".

Dos mitades muy distintas

El entrenador ha destacado la gran diferencia de actitud que ha tenido su equipo en las dos mitades del partido: "En la primera parte ha competido, ha luchado y ha hecho ocasiones como para haber llegado al descanso al menos con empate, pero en la segunda parte mis jugadores ni han aparecido, nos penalizan en exceso los errores que tenemos. Ellos con muy poco nos han ganado". Estas declaraciones se pueden extrapolar a los 9 partidos disputados anteriormente por la UD Almería. “No hemos competido, nos penalizan en exceso los errores..."

Cuando se le ha cuestionado sobre el estado de ánimo del vestuario, el míster ha manifestado la tristeza por no haber aprovechado las oportunidades de la primera mitad, y la frustración que han sentido al sentirse a merced del equipo donostiarra durante la segunda parte: "Los jugadores están tocados, porque en algunos momentos del partido han sido superiores a la Real, pero después han estado a merced de ellos y no hemos podido hacer nada".

Parece sentenciado

Sobre su continuidad, Francisco se ha mostrado sumiso, comprensivo y comprometido: "Estamos a disposición del club para lo que quiera y no voy a bajar los brazos y voy a pelear hasta el final para sacar esto adelante, sea como entrenador o como recogepelotas. Me considero un hombre de club. Lo que tenga que ser, será. No está en mis manos".

Parece todo está visto para sentencia, pero en fútbol nunca se sabe. En la próximas horas se espera una reunión de la junta directiva para tratar la continuidad del míster. ¿Optarán por la paciencia?