El empate a dos ante el Tenerife cosechado en el Juegos Mediterráneos la pasada jornada acabó con Sergi Barjuan como entrenador rojiblanco. Tras una semana de negociaciones  entre la directiva del club andaluz y distintos preparadores que no tienen conjunto en el que desarrollar su profesión, el Almería no ha encontrado a esa pieza que le falta en el vestuario, el dirigente que sea capaz de revertir la situación actual y llevar al equipo urcitano a los puestos altos de la clasificación.

Miguel Rivera ha sido el encargado de entrenar al primer equipo hasta la llegada de un nuevo técnico, y en su cabeza no pasa nada más que no sea ganar frente al Girona y poder subir el ánimo tanto del equipo como de la afición.

"Hay que derribar la muralla"

Sensato y sincero, Miguel Rivera contestó a todas las preguntas formuladas por los medios que asistieron a la rueda de prensa. Como no podía de ser de otra manera, el objetivo primordial del malagueño es la consecución de los tres puntos en territorio catalán. El futuro, así como la posible continuidad en el banquillo de la UD Almería no es su preocupación en la actualidad: "Ojalá ganemos 0-3 en Girona y venga un entrenador nuevo, lo importante es ganar. Ahora mismo lo que tenemos es que reconquistar la confianza de todos y en eso estamos. Es mucho trabajo y volveremos muy felices si ganamos en el minunto noventa, por 0-1 y sufriendo. Hay que derribar la muralla, necesitamos conseguir una victoria".

Un gran trabajo de cambio y adaptación es el que ha tenido que realizar Rivera en tan sólo cinco días, pero el míster del filial lo tenía claro: "Desde una opinión muy humilde, estoy tratanto ver cuál es el problema de cada jugador en su parcela personal, porque en el fútbol cuando no llegan los resultados aparecen las dudas. Pero sí es verdad que he descubierto muchísimo más compromiso, unidad y profesionalidad de la que se podía ver desde fuera, pero sobre todo he visto un querer cambiar la dinámica desde el trabajo y sacrificio".

"Tiene que haber una buena respuesta defensiva"

Sobre su equipo, sobre cómo esta el Almería de cara al envite ante el Girona, Rivera asume que el punto primordial a mejorar es tratar de corregir la posición del equipo con y sin balón, tanto en el momento de atacar como a la hora de defender: "Cuando estemos en el último tercio de campo tenemos que estar totalmente concentrados para finalizar y si no es así, tiene que haber una buena respuesta de orden defensivo".

También tuvo palabras para la plantilla, en la que confía totalmente y a la que califica de 'profesional', pero admitió que la defensa, debido a la gran cantidad de bajas y dudas que existen en ella, es la línea más frágil del conjunto. Esta acumulación de tragedias en forma de dolencias podría dar la oportunidad a Antonio Marín de jugar como titular. Pero Miguel quiso dejar claro que el filial no tendrá una mayor participación en el equipo por el hecho de que los conozca, lo cual no significa que no jugarán, sino que parten con las mismas opciones que el resto de compañeros.

Rivera analiza a su próximo rival, el Girona

Miguel Rivera le ha realizado la 'ITV' al rival. A lo largo de la actual semana, además de centrarse en la mejora anímica de la plantilla, también tuvo tiempo para analizar al Girona en porfundidad y conocer "todo" de él: "Es un equipo que juega con tres centrales, cinco centroncampistas, con dos carrileros muy abiertos y arriba juega con dos. Tiene jugadores muy habilidosos y el propio Alcalá que estuvo por aquí. En la zona de ataque hay variantes, puede jugar Mata con Jairo o Felipe. Todas las ideas de fútbol las tiene muy bien aprendidas y provoca partido muy locos, de idas y venidas, por eso hemos hecho tanto hincapié en el control. Tinen gente de mucha talla sobre el verde", concluía.

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Sobre el autor
Julio Pérez Fernández
Redactor de la UD Almería