Nuevo partido con dominio repartido para la Unión Deportiva Las Palmas. El cuadro liderado por Paco Herrera comenzó la disputa con unas buenas formas futbolísticas que le llevaron a dominar el encuentro a sus anchas, haciendo gala de unas dotes técnicas ante las que el Real Zaragoza no podía poner la réplica. Los maños se limitaban a mantener el orden sobre el césped pero, si en meses anteriores el cuadro insular necesitaba ser abofeteado para posteriormente despertar, a día de hoy el hecho de posicionarse en ventaja en el marcador se está convirtiendo en el primer mal pronunciado de un equipo que descarta bajar los brazos en la gran final por el ascenso a la Primera División.

Herrera repite formación

Para el encuentro disputado este miércoles en La Romareda, el máximo responsable técnico de la escuadra isleña optó por formar de inicio con el mismo esquema táctico ideado para cerrar la eliminatoria pasada ante el Real Valladolid. Contando con confianza plena en sus futbolistas, el preparador amarillo siguió dando continuidad a Raúl Lizoain bajo palos, mientras que la línea de cuatro defensores volvió a estar esquematizada con Ángel López y David Simón en los laterales, siendo el centro de la zaga completado por Aythami Artiles y David García.

En la parcela central del terreno de juego, Javi Castellano asumió las labores defensivas, mientras que Culio, Hernán y Roque se encargaron de unirse como el complemento ideal para el futbolista de Tamaraceite. En posiciones más adelantadas, Jonathan Viera volvió a contar con raíces de inicio en banda izquierda, pese a que sus funciones quedaban centradas en una posición más cercana a Sergio Araujo, un futbolista que, precisamente, no encaró su mejor tarde como futbolista de la Unión Deportiva Las Palmas.

El máximo goleador de la escuadra amarilla formó como máxima referencia ofensiva y, pese a contar con el intento de asociarse en numerosas ocasiones con el futbolista de La Feria, ésta solamente se produjo en el único gol visitante de la tarde, donde varios rechaces acabaron por beneficiar a los de Gran Canaria.

Un rival con la moral en alza

Tras remontar el pasado domingo la eliminatoria ante el Girona, el Real Zaragoza llegó al encuentro de este miércoles con la moral por las nubes. El hecho de ganar en Montilivi con un resultado tan contundente (1-4) hizo que la escuadra maña saltara al césped de La Romareda con la clara intención de dejar en la cuneta a la UD Las Palmas. Para intentarlo, Ranko Popovic saltó al césped con Bono bajo palos y una defensa esquematizada con dos carrileros largos y tres centrales: Fernández, Vallejo, Mario Cabrera y Rico.

En la parcela central del terreno de juego, la pugna propuesta fue constante. El índice de intensidad expuesto por ambas escuadras contó con la misma proporción con respecto al juego limpio, pues las entradas desmedidas y el juego brusco quedaron descartados para esta disputa. Dorca y Galarreta formaron un doble pivote acompañado por la figura de Pedro y Eldin en las bandas, dos futbolistas que lucharon por incomodar en todo momento a los laterales visitantes.

Como máxima referencia ofensiva, Willian José se encargó de llevar las riendas anotadores de un equipo que parece no echar en falta la figura de su máximo realizador, como es Borja Bastón. El ariete del Real Zaragoza esperó una oportunidad desde el banquillo que no llegó, aunque su participación no impidió que el alto porcentaje de efectividad de su escuadra dejara muy tocado a su rival.

Dominio visitante, gol y relajación

Los primeros compases de la disputa se sucedieron con dominio pronunciado de los visitantes. Sobre el césped, la disposición amarilla, hoy de celeste, parecía ser la indicada para partir en ventaja hacia el segundo intercambio de golpes que el Estadio de Gran Canaria acogerá el próximo domingo. Solvencia defensiva y distribución bastante destacada en la parcela central del terreno de juego, donde la labor de Javi Castellano seguía siendo primordial. Rápido al cruce para facilitar el toque de sus compañeros, que protagonizaban un juego vertical en el que las ocasiones comenzaron a llegar tímidamente.

Aproximaciones foráneas por los dominios de Bono que el Real Zaragoza lograba despejar con solvencia, pero sería en el minuto 20 cuando la figura de Jonathan Viera se agrandó por encima del resto para asestar el primer guantazo de la gran final. Un centro colgado desde banda derecha llegó a las inmediaciones de Sergio Araujo, que hizo valer su poderío físico para encontrar al portador del dorsal número 20 y, con el exterior de la pierna derecha, mandó el balón al fondo de la red.

Las Palmas se ponía en ventaja pero, nuevamente, éste se convertiría en el primer mal de los de Paco Herrera. Al igual que en Pucela, el cuadro grancanario se puso por delante pero, tras firmarlo, el partido pasó a ser dominado por el rival. Los amarillos se limitaban a mantener el orden para posteriormente intentar asumir el peso del juego, algo que no sucedió, hasta que una jugada desafortunada acabó con el empate de Rico. Los maños colgaron un balón desde línea de fondo que el jugador local transformó en gol con su testa, por lo que la disputa llegaba en tablas al descanso.

Duro mazazo tras la reanudación

Cuando la segunda mitad comenzó a andar, el Real Zaragoza logró remontar el tanto inicial firmado por Jonathan Viera. Un error a la hora de medir de Raúl Lizoain acabó con Pedro asestando la segunda bofetada a la escuadra insular, que por primera vez asumía una desventaja en el marcador durante el presente play off de ascenso. A raíz de ahí, los grancanarios no bajaron los brazos y lo intentaron por todos los medios, pero la falta de eficacia a la hora de definir les acabó por condenar.

Fotografía: LFP

Roque Mesa disfrutó de dos acciones claras para poner el empate, pero sus remates se marcharon desviados por centímetros. Las Palmas quería empatar para sacar partido de los goles materializados en campo contrario, pero finalmente no pudo ser posible. La figura de Sergio Araujo quedaba anulada por las cualidades defensivas de los locales y Paco Herrera movió ficha desde el banquillo, dando entrada a Valerón. La figura de ‘El Mago’ volvió a ser recibida bajo una sonora ovación, pero su labor no pudo destacar debido a la dureza empleada por los adversarios.

Minutos después, Willian José puso la sentencia. El atacante local mandó al fondo de la red una nueva acción en la que Raúl Lizoain no estuvo nada acertado, por lo que los maños aumentaron la renta en un partido que les aporta una ventaja momentánea de dos goles para el partido de vuelta que se disputará en el Estadio de Gran Canaria. Posteriormente, el máximo responsable técnico amarillo dio entrada a Asdrúbal y Momo, pero ya era tarde.

Gran Canaria decidirá

Los palmenses no encontraron la manera de acortar distancias en el marcador y se verán obligados a intentar la remontada el próximo domingo en el recinto de Siete Palmas, donde el apoyo del público será fundamental. El mensaje mandado desde el vestuario se centra en un optimismo generalizado de cara al segundo intercambio de golpes.

UD Las Palmas y Real Zaragoza. Dos históricos con el deseo destacado de recuperar la categoría perdida. Una Primera División que les espera con los brazos abiertos y, pese a que los maños parten en ventaja, las opciones amarillas de vencer quedan intactas gracias al gol firmado por Jonathan Viera. Todo o nada. El próximo domingo, el feudo insular marcará el destino de dos conjuntos decididos a alzar los brazos al cielo de la isla de manera triunfal.