Alfredo Ortuño 2014/2015: un refuerzo descartado

La Unión Deportiva Las Palmas contaba con la necesidad destacada de buscar una nueva alternativa a su máxima referencia ofensiva. Sergio Araujo, el hombre más realizador de toda la plantilla, comenzó a atravesar un momento de sequía prolongada en el que la dirección técnica decidió movilizarse. La escuadra más anotadora del torneo no podía quedarse de brazos cruzados en una temporada que estaba siendo completamente exitosa en el apartado deportivo, pues incluso la llegada de Jonathan Viera parecía sumar más mordiente para el frente de ataque. Finalmente, la entidad insular cerró la contratación en forma de cesión del Alfredo Ortuño, un delantero que llegó a la isla procedente del Granada con la condición de que, en caso de lograr el ascenso a Primera División, éste pasaría a ser traspasado obligatoriamente por una cantidad cifrada en un millón de euros.

Llegada triunfante

Avalado por el gran final de campeonato protagonizado durante el curso anterior en el Girona, Alfredo Ortuño llegó a Gran Canaria postulándose como una pieza clave para los esquemas tácticos de Paco Herrera. El yeclano anotó un total de nueve goles que ayudaron a la entidad catalana a permanecer un año más en la categoría de plata, evitando así el descenso a la Segunda División B. En su llegada a la isla tras no cuajar en su equipo propietario, el Granada CF, el propio futbolista asumió la exigencia que aporta defender la camiseta de la Unión Deportiva Las Palmas y prometió una cifra de “dos dígitos” que finalmente no pudo conseguir.

Los primeros días de adaptación encontraron pronto premio, pues pasó a contar con su primera oportunidad desde el inicio en la visita realizada a Palamós, donde el viento condicionó de manera contundente su estreno como jugador amarillo. En el tiempo de descanso, el máximo responsable técnico de la escuadra insular decidió reemplazarle para aportar mayor orden en la retaguardia, mientras que una semana después sí encontró la fortuna de cara a portería ante el Mallorca, rival ante el que anotó su primera diana. El murciano ingresó en el césped con los isleños en desventaja, hasta que logró poner las tablas en el marcador para que, posteriormente, Momo firmara la remontada desde los 11 metros.

La crisis deportiva que atravesaba el cuadro grancanario obligó al propio Paco Herrera a variar destacadamente sus esquemas tácticos, por lo que Ortuño se postuló como el principal beneficiado. Pasando a un sistema con dos delanteros, el murciano y Sergio Araujo se adueñaron de una parcela ofensiva en la que el gol volvió a recuperarse, pero varias dolencias físicas y una decadencia de rendimiento destacada acabaron con el peninsular perdiendo galones dentro del equipo.

Entrada en un segundo plano

Las dolencias físicas que el de Yecla ha tenido que atravesar acabaron con éste perdiendo criterio dentro de un equipo que volvió a retomar el alto ritmo de competición una vez consumada la pérdida del ascenso directo. A raíz de ahí, las oportunidades a los menos habituales y el mejor juego desplegado fruto de la presión descendida acabó con el equipo grancanario clasificándose para una nueva promoción de ascenso, en la que Ortuño no contó con oportunidades hasta el asalto final.

La Unión Deportiva se veía obligada a, por tercera temporada de manera consecutiva, utilizar la segunda vía para luchar por el asalto a la máxima categoría. Ante el Real Valladolid, el portador del dorsal número ocho no entró en los planes del técnico catalán, mientras que en el encuentro de ida disputado en La Romareda tampoco encontró la manera de luchar por la consecución final del gran objetivo, hasta que la gran final en el Estadio de Gran Canaria le vio coronarse como partícipe del gol del ascenso.

En el minuto 84, Jonathan Viera colgó un balón al área que fue continuado por la testa de Alfredo Ortuño para que, posteriormente, Aythami Artiles dejara en balón en boca de gol, donde Sergio Araujo hizo estallar de júbilo a los 30 mil espectadores presentes en el recinto de Siete Palmas. Euforia descontrolada tras firmar el retorno a la Primera División del fútbol español. Tras entrar en decadencia, el yeclano volvió a tener motivos de alegría que, días después de firmar el objetivo, quedaron en nada.

Alfredo Ortuño saldrá en forma de cesión durante la próxima temporada

Tras oficializarse el avance de categoría de la entidad de Pío XII, ésta queda obligada a realizar la compra de Alfredo Ortuño, cifrada en un millón de euros. Una vez confirmado que se asumirá el desembolso económico, el máximo mandatario, Miguel Ángel Ramírez, ha comunicado que el atacante murciano no entra en los planes técnicos para la próxima temporada, por lo que se le buscará una salida en forma de cesión.