No es oro todo lo que reluce, y mientras las buenas noticias han teñido a la UD Las Palmas desde el ascenso el pasado 21 de junio, suenan ahora las alarmas en Siete Palmas. Una de las estrellas del equipo y uno de los principales artífices del ascenso de categoría, Jonathan Viera, lo tendrá bastante complicado para jugar en el equipo amarillo la próxima temporada, y son muchas las fuentes las que afirman que es prácticamente imposible su vuelta.

Sus buenos números en el equipo desde que llegara al Gran Canaria en el mercado de invierno (siete goles y cuatro asistencias en 21 partidos) hacen que el equipo que tenga sus derechos, el Stándard de Lieja belga, quiera sacar un buen beneficio económico y finalizar de manera positiva su inversión por el jugador, que llegó libre procedente de Valencia.

La agencia a la que pertenece el representante del jugador, ProSoccer24, no ha querido comentar nada respecto al tema por el momento y todo apunta que tardará semanas en pronunciarse. Dicha agencia, a la que pertenecen jugadores de la Liga BBVA como Esteban Granero (Real Sociedad), Kevin Gameiro (Sevilla) y más recientemente Jackson Martínez (Atlético de Madrid), se ciñe al contrato que tiene Viera con el equipo de Lieja, hasta junio de de 2016, y el club afirma que el jugador no se marchará si Ramírez no hace un esfuerzo económico.

El diario grancanario La Provincia ya adelantó esta misma semana que el propio jugador pedía a la directiva amarilla al menos un millón y medio para su traspaso, pero ateniéndose a las declaraciones del presidente tanto en la radio oficial del club como más recientemente en 7.7 radio, "Viera sólo vendrá con la carta de libertad".

Ramírez: "Viera sólo vendrá con la carta de libertad"

Es por ello por lo que a día de hoy, Viera está más lejos que cerca de jugar de amarillo la próxima campaña, e incluso se baraja la posibilidad de juegue en la Liga BBVA, pero no en las filas de la entidad de Pío XII, aunque de momento no hya ninguna oferta sobre la mesa y el Stándard de Lieja está bastante dispuesto a negociar, puesto que su entrenador, Slavoljub Muslin, no cuenta con él en la plantilla del equipo belga.