Está bastante claro que España no es la primera opción de un jugador israelí para jugar en el extranjero. Desde que se tienen datos de la Liga BBVA, tan sólo quince jugadores del país del Jordán han participado en el fútbol español. Algunos de ellos pasaron tan sólo una temporada, pero algunos han disputado prácticamente toda su carrera en clubes españoles y se han convertido en una referencia para sus compatriotas.

Con todo ello, Ofir Kriaf podría convertirse en el número dieciséis en hacer tan arriesgada gesta. El joven talento del Beitar de Jerusalén ha llegado a Gran Canaria y se pondrá a las órdenes de Paco Herrera durante las próximas dos semanas. Si el técnico ve que el jugador se puede adaptar rápido a la dinámica del equipo, la contratación estará más que efectuada, y aunque el idioma pueda ser un gran impedimento, todo apunta a que el jugador israelí se convertirá en la tercera cara nueva de Las Palmas tras las llegadas de Javi Varas y Pedro Bigas.

Esta inesperada llegada para muchos ha traído consigo las primeras comparaciones del aficionado amarillo. Comparaciones con su compatriota Gal Alberman, único futbolista de Israel que ha jugado un partido oficial en las islas (con el Tenerife en la temporada 2005/06), pero sobre todo con uno de los jugadores que más huella ha dejado en el Gran Canaria en estos últimos años: Masoud Shojaei.

El jugador de Shiraz, que despuntó en Osasuna, llegó a tierras amarillas en verano de 2013, siendo uno de los jugadores insignias del equipo en la lucha por el ascenso. Fue presentado junto a Apoño, y ambos resultaron claves en la gran temporada que cuajó el conjunto dirigido por Sergio Lobera. Un ascenso hubiera prolongado el contrato del jugador al menos un año más en Primera División, pero tras la hecatombe de los play-off ante el Córdoba, el jugador hizo las maletas para poner rumbo a tierras cataríes, en las filas del Al-Shahaniya.

Masoud fue de los mejores de Las Palmas en la era de Sergio Lobera

Con el conjunto amarillo, Masoud llegó a disputar más de 2.400 minutos repartidos en 31 encuentros, en los que anotó seis goles y repartió diez asistencias. Su marcha dejó mermada el carril zurdo amarillo, una ausencia que supo suplir Herrera a la perfección con las llegadas de Culio, Guzmán y Jonathan Viera. Así pues, Riaf puede ser el nuevo jugador traído de Oriente Medio en llegar a Siete Palmas, y aunque son de países completamente contrastados, tanto el israelí como el iraní comparten bastantes aspectos en común, tanto dentro como fuera del campo.

Un carácter polivalente

Y es que ambos jugadores comparten una polivalencia fuera de lo común. Pocos jugadores del campeonato se sienten tan cómodos jugando en el centro del campo como de extremos en los dos carriles, y con Masoud, Sergio Lobera lo pudo comprobar. Pese a que el iraní destacó en El Sadar en la mediapunta, las llegadas de Apoño y también con el doble pivote asentado, hicieron que el jugador tuviera que ser titular como interior zurdo, algo que no hizo descender su calidad y su aportación al equipo.

El juego de Kriaf es bastante similar. En el 4-3-3 más característico del Beitar de Jerusalén, el jugador participaba como volante diestro, una posición bastante similar a la de Ivan Rakitic en el Barcelona. Sin embargo, con las categorías inferiores de la Selección de Israel destacó en la mediapunta y llegó a caer en banda en alguna ocasión, todo ello a un máximo nivel.

Destacando a nivel internacional

Con poco más de veinte años, Masoud debutó con la selección absoluta de Irán. De la mano de Branko Ivankovic, el jugador hizo su debut en 2004 y desde aquel momento, el jugador ha sido indiscutible para la selección asiática. Más de 55 partidos disputados, incluidos tres del último Mundial de Brasil, en los que llegó a anotar seis goles.

Por su parte, Kriaf no ha hecho su debut con la selección absoluta de Israel, pero ya despuntaba en sus categorías inferiores y, el Europeo sub-21 de 2013, precisamente con sede en el país del Jordán. Pese a que la selección cayó en la fase de grupos, provocó la eliminación de una de las favoritas, Inglaterra. Y sería el propio Kriaf el que anotara el único tanto de aquel partido, casi sobre la bocina, provocando éxtasis total en Jerusalén.

Jugadores de Israel celenrando el gol de Kriaf. Fotografía: Getty Images

Así pues, Paco Herrera podría incorporar en las próximas semanas a uno de los centrocampistas más completos y con mayor proyección de futuro de Oriente Próximo. Tan sólo 24 años y con un tayectoria en Israel que le avala como un jugador capaz de decidir cualquier partido por muy complicado que sea. De momento, los informes que llegan sobre Kriaf a los despachos de Siete Palmas son bastante optimistas y el técnico catalán tendrá la última palabra sobre él.