Tras semanas y semanas de espera, ya ha llegado. Después de una emocionante Eurocopa y en medio de unos vibrantes Juegos Olímpicos, una nueva temporada de la Liga Santander dará su pistoletazo de salida este fin de semana. En Gran Canaria, máximo optimismo y expectación por ver la Unión Deportiva Las Palmas competir por segunda año consecutivo en la máxima categoría del fútbol español. Y todos los focos estarán puestos tanto en el terreno de juego como en el banquillo del Estadio de Gran Canaria.

Muchos coinciden en que la gran temporada pasada que realizó Las Palmas se debe en gran manera a la mano de Quique Setién. El técnico cántabro cogió las riendas del equipo canario en una situación muy delicada, en puestos de descenso y ofreciendo una imagen más que mejorable. Desde su llegada, el entrenador santanderino dio un lavado de imagen al equipo. Consiguió crear una identidad al club, tuvo una idea del equipo perfecto y fue a por ella. Y con todo ello empezaron a llegar los resultados. Así, un equipo recién ascendido y que entraba en todas las quinielas al descenso, no solo mantuvo la categoría, sino que vivió un final de temporada bastante tranquilo en la mitad de la clasificación.

Todo ello ya es fruto del pasado. Ahora se avecina una nueva temporada y Setién tiene ante sí una campaña bastante extensa y con mil objetivos en la mente. Directiva, vestuario, competición y aficionados. Cuatro frentes abiertos que el técnico de la Unión Deportiva deberá afrontar si quiere que el equipo grancanario continúe en la máxima categoría del fútbol español. 

Lo primero, la permanencia

Tanto el propio Setién como los jugadores de Las Palmas no han querido dejar lugar a las dudas en esta pretemporada. El principal objetivo de la Unión Deportiva en esta nueva campaña es lograr la permanencia en la la Liga Santander. Se tendrán en cuenta los logros cosechados en la pasada temporada, pero lo primero será consolidar la salvación. La permanencia matemática que logró el equipo en el pasado curso no impidió ver lo cara que estuvo la lucha por el descenso. Varios equipos tuvieron opciones hasta la penúltima e incluso la jornada final de Liga.

Uno de los grandes retos de Setién para esta temporada será ayudar a los jugadores, sobre todo a las nuevas incorporaciones, a cambiar esa mentalidad. Desde que se cumpla el objetivo de salvación, el equipo ya podrá poner en mente nuevos objetivos y retos. La gesta de llevar a un recién ascendido hasta la mitad de tabla se consiguió con una una buena priorización, siempre con la salvación como pilar básico.

En esta nueva temporada, todo apunta a que la lucha por no descender a Segunda División será al menos tan disputada como en la campaña pasada. Deportivo Alavés, Leganés y Osasuna llegan con la intención de quedarse, mientras que Sporting de Gijón, Granada o Betis también lucharán por vivir una campaña lo más tranquila posible. Contando a Las Palmas, son siete los equipos potenciales que lucharán por evitar los tres últimos puestos.

En cuestiones numéricas, el Sporting de Gijón consiguió salvar la categoría con 39 puntos. Levante (32), Getafe (36) y Rayo Vallecano (38) firmaron el descenso a Segunda División. Superar la barrera de los 40 puntos será el objetivo a seguir. En el caso de llegar a los 45, todo apunta que Las Palmas podría vivir una temporada tan tranquila como la del curso pasado.

La importancia de los duelos directos

Fue sin duda una de las asignaturas pendientes de Setién la pasada temporada. Pese a que se consiguió la salvación con solvencia, la Unión Deportiva consiguió obtener muy pocos puntos en los enfrentamientos con rivales directos para la salvación. Tanto es así que el equipo amarillo tuvo el famoso golaveraje perdido con dos de los tres equipos que descendieron (Levante, Rayo Vallecano), además de salir derrotada también con equipos como el Sporting de Gijón. Consiguió empatar tan solo con el Getafe y con el Betis.

En el caso de que esta temporada se torne más complicada que la anterior, la importancia de los puntos contra los rivales directos se multiplica. Se hacen vitales factores como echar el cerrojo en casa, evitar conceder goles como local y buscarlos con ahínco a domicilio. En la pasada campaña, Las Palmas no consiguió marcar ni el Coliseum, Vallecas o Benito Villamarín y solo consiguió anotar un gol en El Molinón. Dos goles logró en el Ciutad de Valencia, pero fueron en vano porque el Levante acabó llevándose el partido e hizo bueno el 0-0 de la primera vuelta. En total, un balance bastante negativo contra rivales directos.

Respecto a los recién ascendidos, Las Palmas tiene un balance más positivo en su última temporada en Segunda División. Contra el Alavés consiguió empatar en Mendizorroza (1-1) y logró una importante victoria en El Sadar contra Osasuna (1-2). Sólo se fue de vacío del Municipal de Butarque, donde cayó derrotado ante el Leganés (2-0). Conseguir puntos y sobre todo anotar en estos tres campos podrían ser claves en la lucha por la salvación.

La identidad, un aspecto que no se debe olvidar

Si hay algo que Quique Setién quiso implantar desde su primer día en Siete Palmas es la identidad de juego. Tan importante es ganar como la forma en la que se gana. La Unión Deportiva pasó de ese fútbol más defensivo con Paco Herrera al llamado fútbol total. El fútbol de posesión, de toque, de amar la pelota, de ser paciente buscando los espacios y sobre todo el fútbol del orden. Desde la llegada de Setién, Las Palmas se convirtió en uno de los equipos con más porcentajes de posesión de balón de toda la Liga.

Esa identidad de juego es un aspecto que el equipo amarillo tiene que tratar de no perder. Cuando se consiguió la salvación matemática la temporada pasada, Las Palmas encadenó varios partidos en los que quizás bajó el pistón del acelerador. Se vio a un equipo un tanto más frágil, con más desajustes defensivos y en ocasiones renunciando al balón. Durante esta pretemporada, Setién ha trabajado precisamente para evitar lo acontecido en las tres últimas jornadas (3-2 ante el Granada, 0-0 ante el Athletic y 4-1 con el Málaga).

En las grandes citas del pasado curso se pudo ver a una Unión Deportiva fiel a esa identidad incluso en la derrota. Las visitas de Real Madrid y Barcelona al Estadio de Gran Canaria demostraron que pese a que el equipo no partía como favorito, puso en serios apuros a los dos grandes colosos del fútbol mundial. En ese sentido, en el método Setién lo que menos importa es el nivel del rival, pues el estilo de juego de Las Palmas no cambiará.

El eterno dilema de los laterales

Quique Setién siempre ha apostado por laterales de largo recorrido. Jugadores de banda tan constantes en defensa como presentes en ataque. Eso sí, al técnico santanderino nunca le tembló el pulso a la hora de cambiar el esquema de estos laterales. La pasada temporada dispuso tres tipos de futbolistas: de aspecto más ofensivo (David Simón y Dani Castellano), más atentos en lo defensivo (Javi Garrido y el central David García reconvertido) o auténticos carrileros que hacían las veces de extremos (Nili Perdomo).

En esta temporada, el espectro se reduce considerablemente. Por la derecha, Setién contará con dos laterales mucho más ofensivos, dado que repite David Simón y se suma Míchel Macedo. Todo apunta a que el brasileño será titular en la primera jornada ante el Valencia. A su constancia en el carril diestro se le ha unido el olfato goleador, llegando a marcar dos buenos goles en esta pretemporada. Uno de ellos en la vuelta de la Copa Mahou Canarias ante el Tenerife, que forzó la tanda de penaltis.

Por la izquierda la decisión será mucho más complicada. Tanto Dani Castellano como Hélder Lopes llegan a esta primera jornada con buenas sensaciones, aunque desde la capital se apunta a que será el grancanario el que esté en el primer once liguero en Mestalla. La lesión que arrastra el portugués desde principios de agosto puede ser definitiva en la decisión de Setién. También será una incógnita el papel que tendrá David García en el esquema de Setién. Entre Aythami, Lemos y Pedro Bigas, la competencia en el centro de la zaga será bastante complicada, mientras que en el lateral derecho sus minutos podrían disminuir con la llegada de Macedo.

Recuperar al mejor Araujo o hacer de Livaja el nuevo Willian

Una de las primeras incógnitas que tuvo que resolver Setién nada más llegar a Gran Canaria era el problema en la delantera. Sergio Araujo había anotado goles con Paco Herrera pero estaba bastante lejos de la mejor versión que había ofrecido en la temporada del ascenso. Willian José esperaba su oportunidad y la consiguió, demostrando con goles decisivos que podía ser titular en la Unión Deportiva. Y así fue: desde que Willian asumió la titularidad, la mantuvo hasta la última jornada.

Con la salida del delantero brasileño, la punta de ataque de Las Palmas se ha renovado con la llegada de Marko Livaja. Setién en un principio contaba también con las buenas maneras de José Artiles, cedido la temporada pasada al Racing de Santander. Sin embargo, el canterano ha tenido que pasar estos días por el quirófano debido a una fisura en el cartílago de la rodilla. Se estima su tiempo de recuperación en unos dos meses, por lo que de momento no entrará en las quinielas para tener minutos en la punta de ataque.

Tanto Sergio Araujo como Marko Livaja han visto portería en esta pretemporada. El croata anotó el último gol de los partidos de preparación de Las Palmas (1-1 ante el Darmstadt 98 en Alemania), mientras que los goles del argentino llegaron sobre todo en la primera parte de la pretemporada. El hecho de que uno u otro sea titular en Mestalla no será definitivo para toda la temporada, pero puede decantar el jugador que tiene más la confianza de Setién.

Recuperar al mejor Kevin-Prince Boateng

Hace apenas dos años, Las Palmas luchaba por ascender a la Primera División con un equipo hecho a base de los talentos de la isla. Hace dos años, Quique Setién dirigía al Lugo con un estilo muy parecido al de los canarios. Ahora en la Liga Santander, el técnico amarillo tendrá en su plantilla al que es considerado el primer fichaje galáctico de la Unión Deportiva: Kevin-Prince Boateng. El centrocampista ghanés fue una de las piezas fundamentales de la última gran etapa del Milan; ha participado como titular indiscutible en Mundiales y ha sido una de las revelaciones de la Champions.

Ahora, el trabajo de Setién será recuperar la mejor versión de Prince. En el Schalke 04, el jugador estuvo bastante lejos de recuperar su mejor nivel y siempre era más protagonista por sus acciones fuera del campo. El siete amarillo sabe que llegó a Gran Canaria con la condición de estrella, pero es consciente también de que nadie tiene garantizada la titularidad con Quique Setién en los banquillos.

Durante la pretemporada, Prince ha dado destellos de su calidad. Quizás, como al resto de sus compañeros, le hace falta un poco más de rodaje, pero ya da muestras de entendimiento con el resto de la plantilla. Se asocia, busca el espacio, no para de moverse por todo el campo y lo más importante de todo, tiene la actitud y las ganas necesarias para brillar con luz propia. 

Soñar es gratis en Copa del Rey

Uno de los grandes méritos de Quique Setién la pasada temporada fue la gesta de la Unión Deportiva de llegar a los cuartos de final de la Copa del Rey. El objetivo era competir a un buen nivel independientemente de la ronda que se alcanzara y el equipo superó con creces las expectativas. Eliminó en dieciseisavos de final a la Real Sociedad y a las pocas semanas dejó en la cuneta al Eibar. De los seis partidos que disputó, el equipo solo salió derrotado en uno: en la vuelta de las semifinales ante el Valencia (0-1).

El objetivo para la Unión Deportiva no cambiará en esta edición. Salvo sorpresa de última hora, el cuadro canario jugará los dieciseisavos de final frente a otro equipo de la Liga Santander, por lo que la exigencia será máxima desde el primer partido copero. Extrapolar el buen juego en Liga a la Copa del Rey podría hacer que los amarillos volvieran a meterse entre los mejores y por qué no soñar con una semifinales como en la pasada temporada.

Además, será una gran prueba para ver a los menos habituales. Willian José se consagró en la titularidad gracias a sus buenas actuaciones coperas ante la Real Sociedad; Raúl Lizoain apuntó maneras jugándolo todo en Copa y jugadores como Wakaso Mubarak o Momo Figueroa aumentaron sus minutos en Liga gracias a sus solventes partidos contra la Real Sociedad y el Eibar. La Copa fue además la competición donde Nili explotó definitivamente, teniendo minutos y partidos como titular con ficha del filial.