El Valencia, ese equipo imprevisible que Juan Antonio Pizzi recogió a cinco puntos del descenso con la difícil misión de enderezar el rumbo de un vestuario abatido y hundido, parece que ha dado un golpe en la mesa y los dos triunfos consecutivos ante el FC Barcelona en el Camp Nou (2-3) y la exhibición ante el Betis en Mestalla (5-0), le ha otorgado confianza a una plantilla que sueña con hacerse con la cuarta plaza, un lugar privilegiado que da acceso a competir la Champions League, y de la que en estos momentos es dueño el Athletic de Bilbao, rival al que le ha recortado 4 puntos pero que todavía cuenta con un amplio colchón de 13.

El conjunto ché está en una tendencia ascendente y no tiene nada que ver con ese cuadro dirigido por Miroslav Djukic que se mostraba sin ilusión sobre el terreno de juego, sin ganas ni garra, incapaz de ofrecer juego y actitud a una grada que se dejaba la voz partido tras partido y que se marchaba decepcionada ante las actuaciones de sus jugadores, decaídos ante la delicada situación.

El técnico serbio abandonó el club blanquinegro tras encadenar seis victorias, dos empates y ocho derrotas en Liga, y sin la capacidad de revertir el rumbo de un grupo que parecía condenado al fracaso. Con la llegada del míster argentino, el valencianismo recobraba la ilusión, Juan Antonio Pizzi, el ex de San Lorenzo, aterrizaba a la capital del Turia con mucho trabajo por delante, con el objetivo de marcar un camino a seguir y revivir al Valencia con su filosofía de juego.

Compromiso de la plantilla ché

El Valencia de los últimos encuentros ha demostrado que con actitud, entrega y coraje los buenos resultados llegan y, además, le ha añadido buen fútbol, un juego vistoso para el espectador, ese aficionado que en el feudo blanquinegro se siente orgulloso de ver once almas dándolo todo por conseguir tres puntos de oro en cada compromiso para aproximarse a los ansiosos puestos europeos. Este es el Valencia, un equipo que, por fin, se ha despertado.

El conjunto ché se medirá este próximo domingo a un rival directo, el Sevilla del viejo conocido Unai Emery. Los de Nervión, que ocupan la séptima plaza, han visto como en tres jornadas los hombres de Pizzi le han igualado en la tabla pese a tener una amplía ventaja de 7 puntos. Los blanquinegros, con 31 puntos, los mismos que el cuadro andaluz, tienen la oportunidad de hacerse con la séptima posición en el Sánchez Pizjuán, la última plaza que podría dar derecho a disputar la Europa League, si la Real Sociedad no accede a la final de la Copa del Rey.  El Valencia no perderá la esperanza en su lucha por el objetivo de la Liga de Campeones.