Ricardo Costa, como capitán del Valencia, tomó la palabra en rueda de prensa tras el descafeinado entrenamiento de esta mañana. El central portugués, apesadumbrado por el resultado del encuentro de ayer, se mostró triste, derrumbado anímicamente, incluso dejando lágrimas sobre los micrófonos de la sala: “Ayer después del partido no podía hablar, no tenía ganas. Me fui con mi hijo porque estaba llorando, son momentos complicados que cuestan mucho. Cuando firmé contrato aquí quería conseguir un título, la vida es así. El futuro seguramente traiga muchas alegrías, tenemos jóvenes con mucha calidad, en ellos está el futuro. Con la grandeza del Valencia, su afición y la gente que trabaja, se conseguirá un título”.
A pesar de ello, Ricardo Costa no quiso esconderse en un pozo de desesperación, sino que alzó la cabeza, y lanzó un mensaje positivo: “Es duro por todo lo que rodeaba al partido, la afición, los niños, el Presidente, todos los jugadores del club. Todos teníamos ilusión de hacer las cosas perfectas, porque necesitábamos la perfección para superar al Sevilla. La realidad es dura, tener el pase en la mano y en diez segundos perder la oportunidad de disputar una final en Europa. Una final donde tienes el privilegio de ganar, que seguramente a todos los aficionados y gente que trabaja en el Valencia era un momento único. Pero hay que levantar la cabeza, y trabajar”.
Palabras de agradecimiento del luso para una afición que se congregó durante horas en los aledaños de Mestalla, y que no paró de corear el nombre de su equipo hasta el minuto final del encuentro: “Dentro de toda la tristeza, de ese sentimiento, hay que quedarse con algo. Con toda la gente que estuvo y nos esperó en el estadio, estuvieron fenomenales, nos dieron la vida. Intentamos lo máximo, ese es el sentimiento que hay en todo el vestuario, pero un infortunio que nunca más entrará, ayer entró”.
“Con el 3-0 la gente lo sentía, estábamos metidos, centrados con atención. A los peligros que podían venir, y fue un saque de banda, donde normalmente no pasa nada. Ayer la estrella no estuvo con nosotros y no podremos ir a Turín”, continuó.
"Cuando firmé contrato aquí quería conseguir un título, la vida es así"
También explicó lo que habló con Beto, guardameta del Sevillay amigo para él: “No hablé von Beto, solo le felicité por su cumpleaños. Unai es entrenador del Sevilla y Beto fue mi enemigo durante 90 minutos, cada uno hace lo que tiene que hacer, ahora es mi amigo. No tengo problemas en hablar las cosas, sobre la tarjeta de Paco, soy una persona que va de cara. Tenemos que tener humildad en el futbol y no pedir cosas en el fútbol que no son. Ayer con Paco el partido hubiera sido otro. Ahora nosotros estamos todos enfadados, la situación es la que es, la vida tiene estas cosas, pero puede dar la vuelta”.
Pero Ricardo Costa no quiso quedarse ahí, también puso su vista al frente, en el choque ante el Real Madrid que deberán afrontar este próximo domingo: “Hay que cambiar el chip, y sudar la camiseta en el partido contra el Madrid, será muy duro porque se juegan la Liga. Tenemos que ser capaces de contrarrestarles, va a ser un partido duro, tenemos que continuar con alma y espíritu y demostrar que somos el Valencia”.
Para terminar, dejo entrever que estos tres últimos encuentros de Liga serán sus últimos en el Valencia, a pesar de tener contrato hasta la campaña 2014/15 con opción de un año más: “Yo tengo contrato de uno más uno, voy a trabajar hasta el último minuto. Si después me encuadro en el nuevo Valencia y su nuevo proyecto será otra situación. Estoy aquí para dar la cara y pelear por el Valencia”.