El domingo es un día no muy allegado por las personas. Cierra el fin de semana, toca volver a la rutina. Sin embargo, este es diferente, hay ganas de saltarse el viernes y el sábado, y que lleguen las 21.00, que llegue el fútbol. Valencia VS Barcelona. Ese partido que todo futbolero desea entre dos grandes equipos.

Tras un comienzo de temporada en la que ambos conjuntos se disputaban el liderato, la realidad parece haberse asentado. El Barça, segundo, tras el Real Madrid, llega a Mestalla crecido con antojo de ganar, con un Messi, que lleva 6 goles en los últimos dos partidos, y que no quiere parar. Por otro lado, el Valencia de Nuno quiere romper la racha de dos partidos sin ganar, y se acoge a Mestalla para conseguir esa cura que devuelva la ilusión a vestuario y afición.

Precedentes

Historicamente, el feudo valencianista no concede muchos puntos. Cuando llegan equipos grandes, los valencianistas se visten con la camiseta ché, y arropa a su equipo hasta el partido. Mestalla es una olla a presión que estalla con los goles del Valencia. Pocos son los agujeros que los rivales han conseguido derrocar de la muralla ché. Sin embargo, el conjunto blaugrana es experto en conseguir puntos del fortín blanquinegro, aunque no suele lograr la victoria. De ahí, que el resultado mas repetido sea el empate, concretamente a 1 (un total de doce veces ha ocurrido). Los últimos diez encuentros arrojan un balance de dos victorias para los valencianistas, cinco empates, y tres victorias para los culés. La última, el pasado año ante un desconocido Valencia: El encuentro terminó 2-3, en un partido alocado, con hat-trick de Messi, pero en los últimos 5 minutos de la primera mitad, un doblete de Hélder Postiga, añadió fuego a la hoguera. El Valencia lo intentaría, pero el marcador no se movería. En la vuelta de la liga, los de Pizzi harían la hazaña conquistando el Camp Nou por 2-3, de nuevo.

Era un año de un Valencia en transición, en el que, muchos equipos, se aprovecharon de las fugas de Mestalla. Este año es diferente, Amadeo llamó a Lim, que convenció a Bankia, y puso en marcha un proyecto que parece funcionar por el momento. La batuta de Nuno ha conseguido devolver esa esencia de equipo con carácter, e intratable en casa; 16/18 puntos y 15 goles en 6 partidos lo avalan. Luis Enrique quiere terminar con la imbatibilidad blanquinegra.

Vidas paralelas

Valencia y Barça comenzaron sus respectivos inicios de campaña demoledores en ataque y contundentes en defensa. Luchando por el liderato. Sin embargo, la lesión de Parejo, y aquella derrota culé ante el Real Madrid, supusieron, respectivamente, obstaculos que han costado digerir. El Barcelona perdió el liderato ante un Madrid insaciable, y el Valencia ha caído hasta la cuarta posición. Su vida en estas primeras doce jornadas parecen que corran de forma paralera. Este aspecto le da al partido un sentido algo enigmático. ¿Con que cara de la moneda nos sorprenderán?

El gol está servido

Los Valencia-Barcelona son duelos en los que el gol siempre ha estado presente. Encuentros frenéticos, con múltiples ocasiones, que derivan en partidos emocionantes y de infarto. El año pasado, diez fueron los goles en los dos encuentros entre chés y culés.

El Valencia es un equipo renovado, con un Alcacer que empezó tal y como acabó la temporada pasada, con el gol entre ceja y ceja. Sin embargo, acarrea seis jornadas consecutivas sin anotar, pero lo que conlleva el partido, y ante una afición que le idolatra, puede llegar ese gol tan ansiado. Negredo, que será titular por segundo partido consecutivo. El tiburón quiere cazar a su primera presa con la vestimenta blanquinegra. Y por último, el balón parado. Ya son numerosos los goles anotados tras una falta o córner. Otamendi y Mustafi son auténticos aviones. Nuno ha dotado al Valencia de un gran poderío aéreo, algo de lo que el Barcelona peca defensivamente. Nuno lo intentará aprovechar de nuevo.

Por otro lado, nos encontramos al Barcelona. Uno de los mejores ataques, sino el mejor, de toda Europa. América dividida en tres países. Neymar, la revelación, dando la mejor imagen de su futbol este año, Suárez, un 9 descomunal, y por último, Leo Messi. El argentino viene de romper el récord de Zarra y el de Raúl en menos de una semana con dos hat tricks ante Sevilla y Apoel. Viene como una moto, y Mestalla quiere hacerse grande para parar a la pulga. A ello hay que añadirle las llegadas desde atrás de jugadores mediocampistas como Rakitic, y las internadas de Jordi Alba.

Mestalla teme a la pulga

Sobran las palabras para definir a Lionel Messi. De eso no hay duda. Sin embargo, todo goleador tiene domada a sus presas más comunes. Se puede decir que el Valencia es un rival al que el argentino le tiene tomada la medida. Muchos son los goles que le ha anotado. Casualmente, la campaña pasada, 4 de los 5 tantos fueron suyos. Los ha marcado de todos los modos.

(Foto: Infodeportes.com)
(Foto: Infodeportes.com)

Sin embargo, el Valencia ha renovado su zaga, y es lo mejor que funciona del nuevo conjunto ché. 11 goles en 12 partidos, menos de un gol por partido. El segundo equipo menos goleado, tras el Barcelona, y junto al Madrid.

Alves, Mustafi, Otamendi: un triángulo perfecto. El guardameta brasileño esta cuajando una gran temporada, respaldado por un argentino contundente por arriba e implacable al choque, y por un alemán excepcional al cruce. Ellos son los auténticos responsables de parar a la pulga de conseguir su objetivo, pintar de nuevo la porteria blanquinegra de blaugrana.