El Barcelona es ese adversario al que cualquier rival se quiere enfrentar. Un duro oponente para todos los equipos, conjuntos que marcan la fecha de ese encuentro en rojo debido a la magnitud que adquiere el choque. Cualquier jugador sueña con jugar en grandes escenarios como el Camp Nou donde no se necesita motivación extra, las ganas y la ambición se contagian entre los propios futbolistas.

Este sábado el Valencia visita la Ciudad Condal para enfrentarse a partir de las 16:00 horas al bloque dirigido por Luis Enrique, líder de la Liga BBVA, ante cerca de 90.000 espectadores. El conjunto che llega al Camp Nou dispuesto a ser el protagonista de la tarde y brindarle a su afición un triunfo por la Champions, esa ansiada competición para la hinchada blanquinegra.

El feudo culé no es un templo maldito para el equipo valenciano. El estadio azulgrana ha sido testigo de grandes victorias valencianistas, sin ir más lejos la pasada campaña cayó derrotado en su campo por 2-3, con goles de Alexis Sánchez y Leo Messi para los locales, y Paco Alcácer, Pablo Piatti y Dani Parejo para los visitantes. 

Gran remontada blanquinegra

Muchos amantes del fútbol, aficionados culés y blanquinegros, y el actual entrenador azulgrana, Luis Enrique, tendrán en su memoria aquel partido de la temporada 1997/98 disputado curiosamente un lunes y televisado en abierto, un choque que tenía encarrilado el Barcelona con un 3-0 en la primera parte y que el Valencia fue capaz de darle la vuelta al marcador con un 3-4 en apenas 20 minutos.

El cuadro catalán luchaba por el liderato con el Real Madrid y mientras, un necesitado equipo valenciano pugnaba por salir de los puestos de descenso. Los goles de Luis Enrique, Rivaldo y Cáceres (en propia puerta) durante la primera parte parecían hundir a un débil Valencia, pero el argentino Guillermo Morigi apareció en el minuto 70 para colocar el esférico dentro de la red, un gol que marcaría el inicio de la gran remontada blanquinegra.

Doblete del 'Piojo' López

Al tanto de Morigi, le siguió una gran diana de Claudio López tras un testarazo a pase de Juanfran, el 3-2 subía al marcador y provocaba miedo en los locales. Cuando el partido estaba en los minutos finales, volvía a aparecer el más listo de la clase, el ‘Piojo’ López firmaba un doblete después de aprovechar un saque de esquina y perforar la portería de Hesp con un gol de cabeza desde fuera del área, era el minuto 89 y el encuentro parecía estar visto para sentencia.

El Valencia había conseguido empatar un encuentro que lo tenía perdido pero lo mejor para el cuadro che estaba por llegar. El Barcelona sacó desde el centro tras el tanto de Claudio López pero los blanquinegros robaron el balón y un espléndido Morigi le dio un pase en profundidad al ‘Burrito’ Ortega y este fue el encargado de cruzar el esférico al fondo de las mallas. El conjunto valenciano lograba una remontada épica en el Camp Nou, y aquel 19 de enero de 1998 se convertía en un día inolvidable para todo el valencianismo