Esta generación de futbolistas argentinos sigue con la maldición. Después de haber llegado a la final del pasado Campeonato del Mundo, final que perdieron frente a Alemania, la selección argentina volvió a llegar a una final de un gran campeonato con el objetivo de recuperar el trono del continente americano que había perdido desde 1993.

Como ha venido siendo habitual a lo largo del campeonato, el partido tuvo mucha más intensidad que ocasiones, muchos de los jugadores acabaron con molestias la final, entre ellos el único representante del Valencia Club de Fútbol en el torneo, el cotizado central Nicolás Otamendi.

El partido durante los 90 minutos acabó empate a cero, así que se tuvo que disputar un tiempo extra de 30 minutos. Ninguna de las selecciones consiguió anotar durante ese tiempo, así que hubo que decidir el campeón de América desde el punto de penalti. Y aquí no hubo color, el combinado chileno anotó los cuatro penaltis que lanzó (Matías Fernández, Aránguiz,Vidal y Alexis), mientras que Argentina sólo pudo anotar uno de los tres,marcado por el astro argentino Leo Messi, mientras que tanto Gonzalo Higuaín como Éver Banega fallaron los suyos. Chile se proclamaba de esa forma campeona de América por primera vez en su historia.

El partido a lo largo de los 90 minutos fue difícil de observar para el aficionado. En una primera parte bastante igualada, en la que ninguno de los dos conjuntos fue capaz de llevar el peso del juego, fue la selección del Tata Martino quien tuvo la oportunidad más clara en la cabeza de Sergio Agüero, tras una falta puesta por Leo Messi.

La segunda parte fue más de lo mismo, las dos selecciones rechazaban el control de la pelota y la poca participación de los jugadores de más talento de ambos conjuntos como Messi,Pastore o Alexis, provocó que ambos obtarán por generar ocasiones a la contra. Un remate cruzado de Alexis tras un pase fantástico de Mauricio Isla o un remate al segundo palo de Gonzalo Higuaín, tras una contra de libro dirigida por Leo Messi fueron las oportunidades más claras durante estos cuarenta y cinco minutos. Si el partido a lo largo de los 90 minutos tuvo pocas ocasiones, el cansancio provocó que la prórroga fuera un periodo en el que ambas selecciones prefirieron ser más conservadoras.

En cuanto a la participación de Nicolás Otamendi, el futbolista jugó de nuevo los 90 minutos, así como los 30 de prórroga. El futbolista lo ha jugado todo en esta Copa América, a excepción del tercer partido de la primera fase frente a Jamaica. El central valencianista continuó con la buena dinámica de todo el año, muy atento a los cruces y a las anticipaciones, aunque sigue dando muestras de dificultad a la hora de sacar la pelota jugada.