El partido en el Sánchez Pijuan tenía carácter de final para los valencianistas, y más concretamente para Nuno. La derrota en Champions frente al Zenit, el último empate en casa frente a Las Palmas, y en general, el juego y los resultados del equipo  a lo largo de la temporada hacen que la parroquia valencianista reclame medidas drásticas.

El Valencia presentaba una alineación con la clara idea de reforzar el medio, Javi Fuego, Danilo y Enzo Pérez, formando una línea de tres, Parejo y Santi Mina más adelantados y arriba en punta Alcácer. Sorprendía también la suplencia de Jaume, que venía siendo el mejor del equipo, Ryan volvía al once tras su lesión. Nuno buscaba meter músculo en el medio para crear superioridad, sin embargo, eso tenía un problema, las bandas, los flancos del Sevilla, con Vitolo, y Konoplyanka, y las subidas de los laterales, sobre todo Mariano por la derecha, han sido un peligro constante a lo largo de todo el encuentro.

El Valencia, comenzó cediendo el balón al Sevilla, y defendiendo bien atrás, para buscar la contra, aprovechando la velocidad de Mina y Alcácer. Sin embargo, a pesar de la abundancia de jugadores en la medular, el Valencia no conseguía trenzar más de tres pases consecutivos, y el Sevilla se convertía en dominador absoluto del juego, a pesar de que no tenía ocasiones claras para abrir el marcador.

Vitolo, alternando ataques por ambas bandas, fue el principal peligro en la primera mitad. Comenzaban a seguirse las ocasiones para el Sevilla, Llorente tuvo en sus botas el primero, pero disparó mordido y Vitolo no llegó a rematarla en el segundo, también el navarro pudo marcar tras saque de esquina pero atajó Ryan.

El partido no tenía buena pinta para el Valencia, pero todo terminó de truncarse con la expulsión por segunda amarilla de João Cancelo en el minuto 35 tras un manotazo sobre Escudero. Danilo pasó a cubrir el lateral y el Valencia consiguió mantener el empate a 0-0 hasta el descanso.

La segunda mitad comenzó con la entrada de Vezo por Santi Mina, el portugués pasaba a ocupar el lateral derecho. Las malas noticias no tardarían en llegar para el equipo de Nuno, en el minuto 4 Banega se sacó de la chistera un pase de exterior para que Escudero, solo en el segundo palo fusilara a Ryan y adelantara el Sevilla en el marcador.

El Valencia jugaba con diez, y era muy difícil que trazaran alguna jugada, el Sevilla aprovechaba la superioridad para terminar de imponerse en el partido y lanzar el asedio sobre la portería de Ryan. Nuno intentó meter velocidad para buscar alguna contra sacando a Feghouli, por Enzo Pérez, pero el Sevilla bien plantado no daba concesiones, y buscaba aumentar la renta dando entrada a Immobile y Krohn-Dehli.

Si las posibilidades del Valencia para dar la vuelta al marcador eran complicadas, terminaron por esfumarse con una segunda cartulina roja, esta vez a Javi Fuego tras ver la segunda amarilla en una entrada a destiempo sobre Krychowiak.

Nuno decidió retirar del campo a Alcácer y y dar entrada a Bakkali, amparándose en el desequilibrio del belga en el uno contra uno como única esperanza para sacar algo positivo de la visita al Pijuan.

Emery dio entrada a Reyes por Konopylanka e intentó cerrar el partido, el Valencia seguía buscando la épica pero no se dieron ocasiones para los visitantes, y el partido terminó con pitada para los locales por no ser capaces de cerrar el partido ante un equipo con nueve, con el Valencia más hundido, y con ambos equipos aún lejos de los puestos europeos

El Valencia se enfrentará esta semana al Barakaldo en Copa del Rey, y recibirá la siguiente jornada al Barcelona en Mestalla, sin duda el peor rival posible, en el peor momento posible, con muchas bajas  y con el ánimo por los suelos.