El debate en la portería azulgrana quedó zanjado de inmediato en los primeros compases de la pasada temporada. Pese al gran nivel de los dos aspirantes a hacerse con la titularidad, Luis Enrique apostó por el chileno Claudio Bravo para La Liga, mientras que el alemán Ter Stegen sería el encargado de defender el marco culé en Copa del Rey y en UEFA Champions League. 

La apuesta del técnico asturiano resultó ser inmejorable para el conjunto catalán, que se alzó con los tres torneos a la conclusión de la campaña. Por ello, para esta nueva temporada, la jugada realizada ha sido la misma y, hasta la fecha, los resultados vienen siendo óptimos. 

La pasada temporada, el guardameta alemán disputó todos los partidos coperos con el conjunto azulgrana, un total de nueve, incluyendo la final ante el Athletic de Bilbao. En estos encuentros recibió seis goles. El primero, frente a la SD Huesca, en un choque que terminó con goleada azulgrana por 8-1. A este le siguieron los dos que encajó en el Vicente Calderón en los cuartos de final y otros dos que consiguió el Villarreal en seminifales, pero que no consiguieron hacer peligrar el pase a la siguiente ronda. Finalmente, el sexto y último gol fue el anotado por Iñaki Williams en la final del torneo, cuando el partido se acercaba a su final con una ventaja de 3-0 para el Barcelona. 

Culminada de forma espectacular la pasada edición del torneo, los de Luis Enrique avanzan con paso firme este nuevo año con la intención de revalidar el título. Pese a que se perdió los dos primeros encuentros frente al Villanovense, Ter Stegen volvió a la titularidad en la competición en la fase de octavos de final, que enfrentaba a azulgranas y pericos en el derbi catalán. En estos dos partidos ante el Espanyol encajó únicamente un gol en la ida, en un partido que terminó con un 4-1 favorable a los culés que, de esta forma, dejaban práctiamente sentenciada la eliminatoria.

En cuartos de final el rival fue el Athletic Club, rememorando la final de la anterior edición, aunque esta vez a doble partido. En cada uno de ellos, el alemán fue batido por los leones una vez. Primero en San Mamés, en un encuentro que terminó con 1-2 para los de Luis Enrique, y posteriormente en el Camp Nou, en el que la ventaja local fue más amplia, consiguiendo tres goles a su favor.  

El próximo rival copero será el Valencia de Gary Neville. Un conjunto que, tras la mala situación en La Liga, busca dar la sorpresa ante el vigente campeón en un torneo en el que tiene puestas muchas esperanzas.

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