Cuando se habla del Barcelona, siempre se cae en una tesitura: es injusto destacar a alguien por encima de otro dentro del excelente plantel que posee el combinado catalán. Pero sería igualmente indebido no acentuar la aportación de Lionel Andrés Messi, ya por derecho propio uno de los mejores jugadores de la historia del fútbol, si no el mejor. El argentino, de 29 años, se presenta esta noche como la referencia ofensiva de un Barcelona que intentará superar al Valencia en la última eliminatoria antes de la ansiada final de la Copa del Rey. 

Ser la referencia ofensiva de un equipo con atacantes de la talla de Neymar, Luis Suárez, Rakitic o Arda Turan da una idea de la calidad superlativa del astro argentino. A principios de enero sumó un quinto balón de oro al mejor palmarés individual de la historia. Sin embargo, Messi nunca ha destacado estos logros, y siempre ha querido destacar sus trofeos colectivos por encima de lo individual. También por esta vía sobresale el argentino, y es que ha sido partícipe y testigo del mejor club de la historia por trofeos. Es, en definitiva, difícil que alguien vuelva a repetir los éxitos que Messi ha logrado en el fútbol europeo. 

Tras la durísima patada que Filipe Luis le propinó, a la altura de la rodilla, en el partido del pasado sábado, parecía difícil que Messi se recuperase a tiempo para la ida de semifinales ante el Valencia. Sin embargo, y para desgracia del conjunto che, el argentino parece estar en plena forma, ayer se entrenó con normalidad y estará a completa disposición de Luis Enrique si el asturiano estima conveniente alinearlo para el partido de hoy. Leo no ha tenido demasiados minutos en esta edición de la Copa del Rey -solo ha jugado tres partidos completos de seis posibles-, pero cuando lo ha hecho ha jugado a altísimo nivel. En esos 270 minutos acumula ya cuatro asistencias, además de los dos goles que anotó en el partido ante el Espanyol, que le sirvieron al Barcelona para remontar el tanto inicial de Felipe Caicedo y espantar fantasmas tras el empate ante su vecino ese mismo fin de semana. Hoy intentará volver a ser decisivo para dejar la ventaja de la eliminatoria en casa.