La Copa del Rey vuelve a llamar a la puerta de dos equipos que, pese a mostrar predilección por el campeonato liguero, no quieren menospreciar el 'torneo del KO', en el que el formato de eliminatorias implica que cualquier equipo puede tumbar al rival que se ponga de por medio. La historia del torneo cuenta con numerosas hazañas de equipos pequeños que han podido con otros, a priori, superiores; por lo que la Copa del Rey supone la más factible de las oportunidades para abrir las vitrinas de dos equipos que hasta ahora las tienen sin estrenar.

El Villarreal comenzó cómodamente la eliminatoria con un tempranero gol de Gio que, junto con la superioridad inicial que mostraron los de Marcelino, hacia presagiar un plácido partido de vuelta en tierras ilicitanas. Nada más lejos de la realidad, un aguerrido y siempre ordenado Elche remontó el partido haciendo temblar a la, hasta entonces apaciguada, parroquia amarilla. Finalmente Aquino, sobre la bocina, establecía el empate en el marcador para calmar los aires y llegar en condición de igualdad al Martínez Valero.

En el duelo liguero que enfrentó a los dos equipos en el Martínez Valero, terminó con victoria para los de la Plana Baixa con un gol de Uche al término del encuentro.

A resarcirse de los malos resultados ligueros

Los dos equipos llegan a la jornada copera tras haber sido derrotados en sus respectivos encuentros de Liga; el Elche frente al Levante, y el Villarreal en el Camp Nou contra el Barcelona, en el que fue su tercer partido consecutivo sin conocer la victoria; algo inusual para los de Marcelino, que presumían de ser, junto con el Atético de Madrid, la sensación de la temporada. La Copa del Rey es una buena oportunidad para retomar la senda de la victoria.

Sin embargo, los ánimos y las ganas de hacer un buen papel en la Copa del Rey, presuponen un vistoso choque entre dos equipos que, pese a contar con la condición de recién ascendidos a Primera División, están culminando un excelente campeonato liguero.

La verticalidad de los extremos

Una de las claves del encuentro será la velocidad por las bandas. Tanto el Elche como el Villarreal, apuestan por un juego profundo, causando en las entradas por los costados un constante quebradero de cabeza a sus rivales. Con la baja de Cani, la alineación de Marcelino tendrá presumiblemente a Aquino y Hernán Pérez como extremos; dos jugadores verticales, cuyo mejor factor son las arrancadas por las bandas. El Elche, por su parte, cuenta con dos puñales por las bandas como son Carles Gil y Aarón Ñíguez, en las botas de los cuales se centra la mayor parte del peligro ilicitano.

Apartado de las bajas

Marcelino, que ha anunciado en rueda de prensa que realizará cambios en la alineación debido a la excesiva carga de partidos que tienen sus jugadores, no podrá contar con los lesionados Asenjo y Cani; mientras que el técnico ilicitano, Fran Escribá, tiene como único hándicap la baja de su delantero referencia, Manu del Moral.

Posibles onces

Villarreal C.F., S.A.D. 4-4-2 football formation