Noche europea, ambiente de gala. El himno de la Europa League no es como el de Champions, pero pone igualmente los pelos de punta. En las gradas, se respiraba ilusión. Anhelo por ver un jueves más a este imponente 'Submarino' navegar por Europa. Sobre el césped, lo de siempre. El Villarreal, mordiente desde el principio, aprisado por dejar claro quién manda en el Grupo A.

Y la primera, dentro. Un robo de Dos Santos -más cerca de su área que de la medular- propició una verdadera oda al fútbol que culminaría con el balón en la red. Apertura para Vietto, que deja sólo a Gerard, dribla al portero, levanta la cabeza, ve a Cani y gol. Qué fácil es el fútbol cuando lo hacen los buenos. Chiumento, enfadado ante la apatía defensia de los suyos, quiso hacer la guerra por su cuenta en más una ocasión, pero se topaba ante un muro, el amarillo, extremadamente solvente aun sin su káiser.

Como ya sucediese ante el Apollon, el 'Submarino' se puso muy pronto por delante. Solo quedaba mantener la ventaja, jugar fácil y buscar espacios para aumentarla. Disfrutar. Jonathan dos Santos lo entendió a la perfección. El mexicano aprovecha al máximo cada oportunidad que le ofrece Marcelino. Igual que Gerard, igual que Vietto, igual que Marín. El fondo de armario es abismal.

La relajación amarilla propició el empate

El Zúrich, mientras tanto, a correr, intentando cerrar todos los espacios habidos y por haber, con el fin de permanecer con vida el mayor tiempo posible. En esa tesitura, estaba el partido mediado el segundo tiempo. La posesión era casi insultante. El 'Submarino' jugaba a sus anchas, pero era incapaz de generar peligro.

Pasaban los minutos y no aparecía el desatascador. Cani lo intentaba una y otra vez, pero el maño ya no es el que fue. Los suizos, ante el dominio inerte amarillo decidieron ir a por más. Sin llegar a crear peligro, iban acercándose a la meta de Juan Carlos. Hasta que Schonbachler se encontró un balón suelto en el área y lo llevó hasta la red. De ahí, a vestuarios. 

El inicio de la segunda, igual que el de la primera, comenzó con un fuerte arreón amarillo. Eso sí, en esta ocasión, ni Espinosa ni Gerard acertaron a perforar la meta suiza. Tocaba sufrir. La grada, al unísono, reclamó penalti por un posible derribo a Vietto. Sigan, sigan, respondió Ozkahya. Chiumento, instantes después, decidió probar suerte en el área contraria. Su clamoroso piscinazo no hizo caer a un colegiado bien colocado.

El 'Submarino' se desató en la segunda parte

Entonces, la suerte, sonrió al Villarreal. Gerard lejos de sus habituales lares, ejerció de pasador, Espinosa, de receptor, y Vietto, de matador. Golazo. El partido, de nuevo, estaba de cara para un Villarreal que, sin brillar, lo estaba mereciendo.

Y al minuto siguiente, la machada. El propio Vietto recibió una falta en la frontal. Las telarañas de la escuadra se hicieron añicos tras la magistral ejecución de Bruno. Fiesta. Pero el 'Submarino' quería más. Cani frotó la lámpara y dejó solo a Gerard ante un Da Costa que reclamó su instante de gloria con una parada estratosférica.

Corría el tiempo, Marcelino movía ficha. Gio, Chéryshev y Pina saltaron al césped. Minutos para todos. Pero el protagonismo, para los de siempre. Gio, instantes después de ingresar en el terreno de juego desató la ola en El Madrigal al hacer subir el cuarto al marcador.

El Zúrich, cansado de correr tras el balón, alzó la bandera de rendición, otorgando en monopolio los últimos minutos de encuentro a su verdugo. Este, empático, evitó hacer sangre. Y así concluyó un encuentro en el que el 'Submarino' demostró que quiere hacer algo grande en Europa. Que anhela reescribir la más groriosa historia de su club. Esta vez, con títulos de por medio.

Puntuaciones VAVEL

Villarreal (4) Zurich (1)

   
Juan Carlos 6 Da Costa 5
Mario 7 Koch 6
Gabriel 8 Nef 4
V. Ruiz 7 Djimsti 5
A. Marín 7 Kukeli 5
J. Dos Santos 7 Yapi 4
Bruno 8 Buff 5
Cani 6 Schonbachler 6
Espinosa 7 Chiumento 6
Vietto 8 Chikhaoui 5
G. Moreno 7 Chermiti 4
Cambios
Giovanni 7 Elvedi 4
Pina 5 Brunner 5
Chéryshev 5 Rodríguez -