Marcelino García Toral afronta la tercera temporada a bordo del Submarino. Con una plantilla de mayor nivel y la participación en Europa League, el equipo afronta nuevos retos a la espera de encontrar su mejor versión y afianzar el proyecto del técnico. Especialista en mejorar equipos en decadencia, el técnico tiene en su plan de ruta estabilizar un proyecto a medio plazo. 

El técnico inició su proyecto en Villarreal en un momento complicado para el club. Era 2013 y los castellonenses disputaban la Segunda División del fútbol español. Después de un inicio dubitativo, el equipo buscó a un entrenador con experiencia y contrató a uno que ya había conseguido dos ascensos pero que acumulaba algunos fracasos. 

Inicios

Marcelino debutó como entrenador en el C. D. Lealtad, de Tercera División, en la temporada 1997-1998. Ascendió al equipo a Segunda División B, lo que le serviría para fichar por el filial del Sporting de Gijón en 2001 y, posteriormente, llegar a entrenar al primer equipo. Con los asturianos entrenó por primera vez en Segunda División, sin conseguir ascender al equipo. 

Conseguiría su primer ascenso a la máxima categoría con el Recreativo de Huelva, conjunto que le fichó en 2005 y vió como en 2007 situaba al equipo en la octava posición de Primera División. El buen trabajo puso al técnico en el escaparate, y el Racing de Santander le fichó en junio de 2007. Con los cántabros consiguió clasificarse para disputar competiciones europeas, disputando la Copa de la UEFA (Europa League, actualmente). 

Los méritos permitieron a Marcelino ser el técnico mejor pagado del fútbol español en 2008, con un salario mayor que el de los entrenadores de Real Madrid o FC Barcelona. Eso sería en el Real Zaragoza, que había descendido a Segunda División la anterior temporada. Allí consiguió el segundo ascenso a la máxima categoría, aunque el flojo rendimiento del equipo en Primera División forzaría el cese del técnico la siguiente temporada. 

Ya en 2011, el Racing de Santander estaba en posiciones de descenso a Segunda División y volvió a confiar en Marcelino. Y el técnico lideró la mejora de rendimiento, salvando al equipo cántabro, aunque dejó el equipo al finalizar la temporada por discrepancias con la directiva. Fue entonces cuando el Sevilla FC se interesó por su contratación.

Marcelino fue presentado como nuevo entrenador del Sevilla el 7 de junio de 2011. Con algunas libertades en contratación de jugadores y planificación de plantilla, el técnico formó un conjunto que creó cierta expectativa. Aunque no pudo tener en la plantilla a un jugador que ya había entrenado previamente y que creía necesario para el proyecto: Gio Dos Santos. Los malos resultados llevaron a que fuera cesado en febrero de 2012.

Llegada a Villarreal

El 14 de enero de 2013, Marcelino fue contratado por el Villarreal CF con un contrato hasta final de temporada. El técnico logró el que sería su tercer ascenso a Primera División, así como la renovación del contrato por dos temporadas más. 

La primera temporada del Villarreal de Marcelino en la Liga BBVA acabó con la clasificación del equipo para competición europea, tras lograr la sexta plaza. Además, el Villarreal estableció un nuevo récord, siendo el equipo ascendido que ha conseguido más puntos tras 16 jornadas con un total de 28. El técnico pudo contar para este proyecto con el jugador que ya entrenó en el Racing y quiso en el Sevilla, el delantero Gio Dos Santos. Y no lo hizo solo, ya que los castellonenses también se reforzaron con jugadores con experiencia en Primera División, como Pina o Asenjo. 

Para iniciar la segunda temporada y poder hacer frente a las tres competiciones, el equipo castellonense reforzó la defensa con Rukavina y el centro del campo con Cheryshev, Espinosa y Jonathan Dos Santos. Para la delantera se preparó la mayor inversión. Con un coste similar al de goleadores de antaño, como Rossi, llegó Luciano Vietto

Con estos refuerzos, la plantilla del Villarreal se prepara para afrontar los nuevos objetivos. Así como un Marcelino que se ha especializado en revitalizar equipos, y que ahora lidera un proyecto que debe colocar al Villarreal en el lugar donde le corresponde. Y ese no es otro que la élite del fútbol español.