Tras el empate en la ida, el Villarreal y el Borussia se enfrentan en Europa League para disputarse la primera plaza del Grupo A. Esto no es cosa fácil para ninguno de los dos. Los alemanes juegan lejos de su casa pese a los más de tres mil aficionados que acompañarán a los jugadores desde la grada. En cambio, el Villarreal juega en casa pero lleva a sus espaldas una mala racha de resultados tanto en el marcador como en el juego y acumula una serie de lesiones que puede pasar factura.
El Mönchengladbach llega en un gran estado de forma en el que se juegan mucho. Seguir en Europa y poder cruzarse con un equipo más asequible sería más que un premio para estos. Por ello, los alemanes vienen con todo a conseguir llevarse los tres puntos, certificar el pase y situarse ya matemáticamente como líderes de grupo.
Algo que jugará mucho en favor de los futbolistas es el apoyo de la afición, una afición que se caracteriza por su gran grupo de animación que se desplaza allá donde viaje el equipo. Más de tres mil personas pisarán las calles de Vila-real y cerca de unas trescientas solo podrán recibir al bus ya que vienen sin entrada alguna. Los futbolistas notan el calor de la grada allá donde van y es más que obvio que la cantidad de personas que se desplazan para verles ganar animarán hasta el final.
Actualmente, el Borussia ocupa la tercera plaza de la Bundesliga. Se encuentran en un gran estado de forma y pese a no ser un equipo que anote demasiados goles es muy fiable en defensa. Esta defensa la lidera un jugador español, Domínguez, que vistió la blanquirroja del Atleti años atrás.
Una serie de grandes futbolistas han salido de estas filas como Marko Marin, Marco Reus y Dante entre otros. Actualmente jugadores de la talla de Dominguez, Sommer, Kramer o Thorgan Hazard encabezan un equipo acostumbrado a ganar. Juegan y suelen usar un fútbol muy ofensivo, típico de las ligas alemanas. Un fútbol directo en el que se combina el toque. Las continuas ocasiones de gol no son realmente su punto fuerte pero cuando llegan a portería acaban las jugadas con efectividad. Esto ligado al buen sistema de juego defensivo les hace ser a día de hoy uno de los equipos más fuertes del panorama europeo.
Lucien Favre dirige a un equipo con ganas de mirar hacia arriba, con expectativas de futuro y con un único sueño, hacer historia en la Europa League. No cabe duda que será un choque de alto voltaje en el cual ambos equipos se juegan el pase como líderes de grupo a una fase compleja en la que se recibe a equipos de un nivel muy óptimo.