El empate a domicilio en Elche y la victoria contra la Real Sociedad reafirman la buena racha que el Villarreal viene cosechando desde antes del parón. El conjunto amarillo llegaba a Málaga con el buen sabor de boca que tiene un equipo que no pierde desde Noviembre. Pero no lo iba a tener nada fácil. En frente un Málaga que también está cosechando una muy buena temporada, nombrado por muchos como el equipo revelación. Si bien habían tenido una trayectoria similar durante la primera vuelta, también habían iniciado 2015 de una forma semejante, hasta el momento de llegar a este encuentro con tan solo un punto de diferencia.
Sobre la bocina
Ambos conjuntos se encontraban tras vencer en sus respectivos partidos coperos, pero no habían contado con la misma suerte en liga, ya que no consiguieron la victoria contra rivales notablemente. La necesidad de ganar y reivindicarse en este partido era vital para continuar con la racha positiva. No obstante, el Villarreal comenzó expectante, a verlas venir. Marcelino planteó el primer tiempo esperando el juego del Málaga, sin atacar de manera excesiva.
Los de Javi Gracia, por el contrario, fueron los que llevaron la voz cantante en gran parte del primer tiempo, dominando el juego y la mayoría de jugadas de peligro. Un buen tiro de Amrabat desde fuera del área que despejaba Asenjo dejaba claras las intenciones de un Málaga que se fue viniendo arriba. Por su parte el Villarreal empezaba a reaccionar y con ello venían las primeras ocasiones de peligro. Un par de centros de Cheryshev, aunque sin rematador, anunciaban al conjunto blanquiazul que no les iba a ser nada fácil. El propio Cheryshev sería el primero en avisar, y por dos veces. Una de cabeza a centro de Uche, y otra mediante un disparo desde lejos daban los primeros sustos al conjunto andaluz.
Pero no tardaba en reaccionar el conjunto boquerón, que con dos ocasiones consecutivas metía el miedo en el cuerpo a los de Marcelino. Primero un disparo cruzado de Antunes desde treinta metros hacía estirarse a Asenjo, que despejaba a córner tras una espléndida parada. En ese mismo saque de esquina, Duda lo intentaba con un disparo directo, que se habría convertido en un espectacular ‘gol olímpico’ si no llega a ser por la rápida intervenciaón de Asenjo, después de rectificar para meter los puños.
El submarino no se achicó, y fue rápida su réplica, teniendo Uche la ocasión más clara hasta el momento. Una jugada entre Dos Santos y Trigueros acababa con un balón picado que caía a los pies del nigeriano, que solo ante la portería rival la estrellaba en el cuerpo de Kameni.
Y cuando parecía que no había tiempo para más subía el primero para el conjunto visitante. Una falta favorable al Villarreal permitía una última ocasión antes del pitido. Ésta la aprovechaba Cheryshev para realizar un centro, que tras ser prolongado por Vietto le caería a Jonathan Dos Santos, empalandola de una manera ejemplar para hacer el primero de la tarde y aventajar a los suyos.
Desajuste momentáneo e igualada final
La segunda parte comenzó más activa que la primera, pero con la misma dinámica. El Málaga, esta vez, con más motivo para luchar por el balón, lo seguía intentando. El Villarreal había logrado su objetivo, adelantarse sin arriesgar demasiado. En este segundo inicio los andaluces no se vinieron abajo pese al gol y buscaron con afán la igualada.
A partir de este momento se vivieron los minutos más locos del partido. Un disparo desde fuera del área de Rosales lo despejaría Asenjo, pero le caería a Darder, que solo ante el guardameta definía y hacía el primero. O eso fue lo que señaló el colegiado, pero las protestas y la conversación con su linier le hicieron retractarse y anular un gol que aparentemente no era antirreglamentario. Casi inmediatamente después se desataría la locura en Málaga. Como si de un tema del Karma se tratase, la suerte le devolvería la jugada al conjunto local. Un golpeo en largo de Antunes desde su campo y el fallo al intentar despejar por la defensa castellonense favorecían que Amrabat recogiera un balón botado y con un gran golpeo sobrepasara a Asenjo por encima poniendo el -ahora sí- empate en el marcador.
El luminoso no se movería más. Ambos conjuntos lo siguieron intentando pero sin fortuna. La chispa que habían tenido jugadores como Cheryshev o Trigueros se fue diluyendo a lo largo de la segunda parte hasta ser sustituidos. El gol no ayudó a que el Villarreal consiguiera despertar del todo, y tampoco hizo que el Málaga tuviera demasiada incidencia en tareas ofensivas. Los últimos minutos se caracterizaron por las intermitentes ocasiones alternadas entre ambos conjuntos, pero sin demasiado peligro.
Con este empate los dos equipos mantienen posiciones, uno detrás del otro. Ninguno de los dos combinados consiguió la ansiada victoria que les hubiera servido, bien para distanciarse más uno del otro, en el caso del Villarreal, o bien para arrebatarle la posición, en caso del Málaga. Ambos tendrán que seguir trabajando duramente para obtener esa codiciada sexta plaza que por ahora mantiene el Villarreal, pero que se presume reñida, este año en las que las posiciones más adelantadas ya parecen tener dueños.