El Villarreal no pudo desearle una pronta recuperación a su capitán en forma de victoria. Todo lo contrario. Discreto y gris partido de los de Marcelino, que se vieron superados por un Rayo que hacía casi tres meses que no lograba ganar en su estadio.

Los dos goles vinieron en la segunda parte. Bueno aprovechó una error defensivo en un saque de esquina y Kakuta finalizaría una gran jugada colectiva rayista. Paso atrás del Villarreal en su lucha por alcanzar los puestos de Champions antes de retomar el jueves su andadura en la Europa League.

Debut de Sergio Marcos en Primera División

Las rotaciones fueron una vez más el protagonista de la alineación del Villarreal. La carga de partidos y la importante cita europea en ciernes contra el Salzburgo hacía que jugadores de la importancia de Vietto o Chéryshev partieran desde el banquillo.

Como consecuencia de ello, la  gran sorpresa en el once 'groguet' fue la titularidad de Sergio Marcos. Debido a la conocida lesión de gravedad de Bruno, Marcelino decidió que fuerael joven canterano quien acompañara a Pina en la medular. 

Víctor Ruiz y Giovani desperdiciaron claras ocasiones

Poco fútbol se vio en la primera parte en Vallecas. Partido trabado y anodino en el que el Rayo controlaba la posesión, pero era el Villarreal quien disfrutaría de las ocasiones más claras. Primero, Víctor Ruiz no supo definir ante Toño y mandó a las nubes un gran pase del debutante Sergio Marcos. Gio, pocos minutos después, en un nuevo mano a mano, regateó al portero rayista y su disparo salió lamiendo el palo.

El Rayo, con más ímpetu que acierto, tuvo en la cabeza de Licá su principal ocasión. Buena maniobra de Kakuta por la banda y remate del medio portugués que no pudo orientar hacia la puerta amarilla.

Sin reacción ante los goles adversos 

El Villarreal saltó en la segunda parte decidido a buscar el gol. Fue en el tramo inicial de la reandación cuando los de Marcelino desplegarían su mejor juego y buscaron en mayor medida el área rival. Pero todo cambió con el gol de Bueno. Saque de esquina del Rayo en el que Moi Gómez se despista de su marca y el ariete del Rayo baja el balón y lo cuela entre las piernas de Asenjo.

A partir de ahí, el 'Submarino' naufragó y no se encontró a sí mismo. Marcelino no tardó en hacer cambios y sacó a Chéryshev, Vietto y Trigueros para tratar de recuperar la frescura en ataque, pero careció de la brillantez que le acostumbra. Sin ideas, sin crear juego y, además, sin solidez defensiva.

Prueba de ello el segundo gol del Rayo. Peina Manucho un envío largo de la defensa, Licá apura la línea de fondo y Kakuta bate a Asenjo de un disparo raso. Demasiado cuesta arriba se le ponía el partido al Villarreal. El cansancio del partido copero ante el Barcelona no tardaría en aparecer y, aunque Vietto mandó un balón al poste que hubiera podido meter a su equipo en el partido, el Rayo gozaría de un final de partido plácido y tranquilo. Para alegría de su afición, tres meses después, desde el 21 de noviembre, los tres puntos se quedarían en Vallecas.