El domingo, en el Santiago Bernabeu, el Real Madrid se enfrenta a un complejo rival el cual le pondrá a prueba de cara a sus aspiraciones ligueras en esta ctemporada. El Villarreal parte como el equipo menos capacitado para sumar los tres puntos en esta jornada pero no por ello debe ser así. Los de Marcelino viajan a Madrid con una plantilla repleta de grandes jugadores que buscarán sumar en un estadio complicado en la que será una jornada clave.
Un duelo de alto trámite en el cual el Villarreal llega sin una de sus estrellas por cuestión de contrato. Cheryshev, al llegar cedido por la entidad blanca tiene como norma no disputar ningún encuentro frente al club propietario. Puede que esta sea la oportunidad para jugadores como Campbell, que hace poco se ha integrado en el equipo. Para el Real Madrid toda ausencia es favorable. A la del ruso se suma la de Bruno, capitán del conjunto amarillo. Por parte de los merengues todo apunta a que su once será el de gala ante una afición que espera ver a los suyos ganando un partido que marque de forma contundente las diferencias.
Si por algo se caracteriza el Real Madrid es por su potente ataque, uno de los mejores del planeta. Con el actual Balón de Oro liderando al conjunto son una de las delanteras más poderosas de la competición. El Villarreal se caracteriza por ser un bloque bastante sólido, sobre todo en defensa. Esta temporada los de Marcelino han encajado pocos goles respecto a otras campañas. Los números no sirven, el submarino deberá poner una marcha más si quiere parar las acometidas potentes del rival que se demuestran en forma constante de contra.
El centro del campo es donde reside el misterio puesto que son muchos los jugadores que están rindiendo a un alto nivel. En la delantera no hay duda, será la “BBC” pero en la cocina se barajan nombres como el de Isco, Kroos, Silva, Khedira o Illarra. Todos jugones, pero solo tres podrán jugar desde el inicio del encuentro. El que más preocupa en esta posición es Isco que está jugando a un ritmo excepcional, el malagueño puede llegar con facilidad a la portería de Asenjo o bien facilitar el último pase para que los delanteros perforen la meta amarilla.
En la defensa todo apunta a mantenerse como hasta el momento, no parece que vayan a haber cambios. Tampoco en la portería en la que Iker Casillas dirigirá una semana más a los suyos mientras trata de no encajar algún gol que pueda complicar el resultado final.
Es uno de los partidazos de la jornada en el que se juegan más de tres puntos. El Real Madrid parte como auténtico favorito pero el Villarreal tratará de dar la sorpresa. Es verdad que los de Castellón no tienen suerte contra el Real Madrid pero teniendo en cuenta el estado de forma de ambos clubes todo puede pasar en un Liga tan ajustada como lo es esta.